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ALIANZA POR LA SALUD – Se publica en el ‘British Medical Journal’ por primera vez estudio sobre impacto del IEPS…

 

Se publica en el ‘British Medical Journal’ por primera vez estudio sobre impacto del IEPS en compra de bebidas azucaradas

 

Por vez primera desde que se implementó el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a las bebidas azucaradas en México se pública en una revista científica de prestigio, el British Medical Journal, el estudio realizado de manera conjunta por el Instituto Nacional de Salud Publica (INSP) y el Centro de Población de la Universidad de Carolina del Norte (UC), respecto a la incidencia del gravamen en la compra de bebidas azucaradas durante 2014.

 

Esta revista se encuentra dentro de las cinco mejores revistas médicas del mundo y tiene un alto puntaje en factor de impacto de 17.4 –para junio 2015–, lo que confirma la calidad del contenido de este medio científico y la calidad de sus grupos de evaluación de las investigaciones que son aprobadas para su publicación.

 

Además, previo a su publicación el estudio contó con un Comité revisor de expertos de diversas instituciones nacionales e internacionales, como lo son: Frank Chaloupka, distinguido profesor de economía en salud del Institute for Health Research and Policy de la Universidad de Illinois, Walter Willet, del Departamento de Nutrición en la Escuela de Salud Pública de Harvard, y del doctor Carlos Aguilar Salinas, subdirector del Departamento de Endocrinología y Metabolismo en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, entre otros expertos reconocidos.

 

El estudio del INSP y la UC que comprendió información de enero 2012 a diciembre 2014, con datos de 6 mil 253 hogares en 53 ciudades, concluye que el volumen promedio de bebidas con impuesto vendidas durante el 2014 fue 6% menor en comparación con las ventas esperadas en ausencia del impuesto.

 

Los hallazgos también mostraron que la reducción se incrementó a lo largo del año, alcanzando una disminución de hasta 12% en el mes de diciembre de ese año. Destacó que la reducción fue mayor para los hogares del nivel socioeconómico más bajo, con un promedio de 9.1% y alcanzando 17.4% en diciembre 2014.

 

Los resultados también muestran que hubo una mayor reducción en la compra de bebidas azucaradas no carbonatadas, posiblemente debido a los precios más altos de estos productos y por ende una mayor elasticidad en el precio de la demanda, además de que el consumidor pudo haber sustituido las bebidas carbonatadas por una versión más barata dada la gran variación en los precios de esta gama de productos.

 

Al respecto, Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor —organización integrante de la Alianza por la Salud Alimentaria—, afirmó que es muy importante la publicación del estudio sobre los resultados del IEPS en refrescos en una prestigiada revista científica como es British Medical Journal. “Las políticas públicas —dijo— que se diseñen e implementen en un país deben estar sustentadas con evidencia. Para ello, quienes promueven y aplican políticas deben basar sus decisiones en los hallazgos de estudios con el suficiente rigor metodológico. Para que un artículo sea publicado en una revista científica debe cumplir con ciertos requisitos de calidad y se somete a un proceso de revisión de pares, que son expertos especializados en el tema y que valoran el rigor científico del escrito y la pertinencia del tema. La calidad y calificación de la publicación dan garantía sobre la metodología y rigor de las investigaciones y el British Medical Journal es una de las más calificadas en el mundo”.

 

En el estudio también se menciona que si se toma en cuenta que el impuesto establecido equivale aproximadamente a un 10% del precio, entonces la reducción –que logró ser mayor a esta cifra durante el último trimestre del 2014– muestra que aún un impuesto pequeño puede modificar la cantidad demandada de bebidas azucaradas. Sin embargo, los autores enfatizan la necesidad de establecer el impuesto en un valor mínimo de 20%, con el fin de observar una mayor reducción en las ventas y por ende en el consumo de bebidas azucaradas y así tener efectos positivos en la salud.

 

 

Fuente: ALIANZA POR LA SALUD ALIMENTARIA 07.Enero.2016