Los gobiernos planean seguir produciendo combustibles fósiles en
grandes cantidades, pese a sus compromisos en el Acuerdo de París
Los gobiernos proyectan un aumento colectivo de la producción mundial de petróleo y gas a lo largo de las próximas dos décadas, a pesar de haber elevado sus compromisos climáticos para limitar el calentamiento de la Tierra a 1,5°C, señaló el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Según el informe sobre la Brecha de producción 2021, la suma de combustibles fósiles que planean producir los países sería más de dos veces mayor de la que permitiría cumplir con los objetivos del Acuerdo de París para el cambio climático.
Detalla que los planes y proyecciones de producción de los gobiernos supondrían un 240% más de carbón, un 57% más de petróleo y un 71% más de gas de lo que sería consistente con limitar el calentamiento global a 1,5 °C.
El estudio hecho por el PNUMA en conjunto con varios institutos de investigación, también indica que sólo se registraría una disminución modesta en la producción de carbón con respecto a los niveles de los últimos años.
Los hallazgos del informe se basan en los perfiles de Alemania, Arabia Saudita, Australia, Brasil, Canadá, China, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos, India, Indonesia, México, Noruega, Reino Unido y Rusia, 15 de los principales países productores de combustibles fósiles y cuyos datos dejan ver que sus gobiernos mantienen un gran apoyo político a la producción de combustibles fósiles.
El documento precisa que los países del G20 han destinado casi 300.000 millones de dólares en fondos adicionales a actividades de combustibles fósiles desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, una cantidad superior a la que han asignado a energías limpias.
En los últimos años, ha disminuido significativamente el financiamiento público internacional para la producción de combustibles fósiles. El estudio reconoce como alentadores estos esfuerzos de las instituciones de asistencia al desarrollo, pero añade que éstos deben complementarse con políticas de exclusión de esas fuentes de energía.
Los científicos recalcaron que cuando los países se comprometen con la neutralidad de emisiones de efecto invernadero para mediados de siglo, deben ser conscientes de que sus objetivos climáticos precisan de una reducción rápida y sustancial de su producción de combustibles fósiles.
Conclusiones
Las principales conclusiones del informe pueden resumirse así:
Las perspectivas globales de inversión extranjera directa para todo el año han mejorado con respecto a las previsiones anteriores.
Fuente: ONU 20 de octubre de 2021