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FAO – Nuevo censo de la agricultura en el mundo en 2016

 

 

 

Las directrices de la FAO, actualizadas y revisadas, fijan las normas internacionales para la recopilación de datos

 

 

En 2016 hay prevista una nueva ronda global de censos agrícolas a iniciativa de los países, en un proceso de recopilación de datos a gran escala que reunirá información y estadísticas sobre el sector agrícola en todo el mundo.

 

En apoyo del proceso, la FAO publicó hoy una serie de directrices actualizadas para ayudar a los gobiernos a realizar sus censos agrícolas a nivel nacional, adaptados a las diferentes necesidades y capacidades de cada país. Se trata de la última edición de las directrices que la Organización de la ONU ofrece cada 10 años.

 

Estos censos son cruciales para que los gobiernos implementen políticas basadas en la evidencia para fomentar el desarrollo agrícola y rural, garantizar el acceso a la tierra, mejorar la seguridad alimentaria y reducir el impacto ambiental negativo de las actividades agrícolas. Los datos del censo también son esenciales para que el sector privado pueda tomar decisiones informadas que orienten sus inversiones en actividades agroindustriales.

 

La información recopilada proporciona una imagen precisa del sector agrícola y un marco de muestreo fiable para las actuales encuestas sobre agricultura. En particular, los censos suponen una recuento completo de la estructura del sector agrícola, incluyendo el número y tamaño de las explotaciones, uso del suelo, superficie de cultivo, intensidad de los cultivos, instalaciones de riego, uso de insumos agrícolas, cabezas de ganado, así como los datos demográficos y de empleo de los agricultores.

 

Sobre la base de las experiencias y lecciones aprendidas en los países durante las últimas décadas, las nuevas directrices forman parte del Programa para el Censo Agropecuario Mundial, iniciativa que coordina la FAO y que abarca el período 2016-2025. Por primera vez, el nuevo programa del censo proporciona orientación sobre cómo obtener e integrar los datos sobre la pesca (la pesca de captura y la acuicultura ya estaban incluidos) y sobre los gases de efecto invernadero y las emisiones de amoníaco de las actividades agrícolas.

 

 

 

 

Fuente: FAO 03.Noviembre.2015