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ONU – Un futuro habitable para todos es posible si tomamos medidas climáticas urgentes

Un futuro habitable para todos es posible
si tomamos medidas climáticas urgentes

  • “El informe de los informes” sobre medio ambiente destaca las numerosas opciones que pueden adoptarse ahora para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse al cambio climático provocado por el hombre. La acción de los gobiernos es clave para frenar el aumento de las temperaturas.

    Elaborado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), el estudio Cambio climático 2023: informe de síntesis, publicado tras una semana de sesiones en Interlaken, Suiza, pone de manifiesto las pérdidas y daños que se están produciendo y que se prevé que continúen produciéndose en un futuro próximo, y que están afectando con especial dureza a las personas y ecosistemas más vulnerables.

    Las temperaturas ya han aumentado 1,1 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales, como consecuencia de más de un siglo de quema de combustibles fósiles, así como de un uso desigual e insostenible de la energía y el suelo. Esto ha dado lugar a fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes e intensos que han causado impactos cada vez más peligrosos sobre la naturaleza y las personas en todas las regiones del mundo.

    Se prevé que la inseguridad alimentaria e hídrica provocada por el clima aumente con el calentamiento: cuando los riesgos se combinan con otros fenómenos adversos, como pandemias o conflictos, se vuelven aún más difíciles de gestionar.

    En el informe se hace hincapié en el poder de los gobiernos para reducir los obstáculos a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, mediante financiación pública y señales claras a los inversores, y la ampliación de medidas políticas de eficacia probada.

    Los cambios en el sector alimentario, la electricidad, el transporte, la industria, los edificios y el uso del suelo se destacan como vías importantes para reducir las emisiones, así como la adopción de estilos de vida bajos en carbono, que mejorarían la salud y el bienestar.

    La Agenda exige el fin del carbón, la generación cero de electricidad para 2035 en todos los países desarrollados y para 2040 en el resto del mundo, y el fin de todas las licencias o financiación de nuevos yacimientos de petróleo y gas, y de cualquier expansión de las reservas de petróleo y gas existentes.

    Fuente: ONU 21 de marzo de 2023