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OMS – Cuestiones que cabe tener en cuenta a fin de regular la inteligencia artificial

Cuestiones que cabe tener en cuenta
a fin de regular la inteligencia artificial

En una nueva publicación, la Organización Mundial de la Salud (OMS) presenta una serie de cuestiones que cabe tener en cuenta a fin de regular la inteligencia artificial para la salud. La publicación recalca la importancia de establecer la efectividad y seguridad de los sistemas de inteligencia artificial, de poner con prontitud estos sistemas a la disposición de quienes los necesiten y de favorecer el diálogo entre las partes interesadas, incluidos los desarrolladores, reguladores, fabricantes, trabajadores de la salud y pacientes.

Las tecnologías de inteligencia artificial, incluidos los grandes modelos lingüísticos, se están desplegando rápidamente, a veces sin total comprensión de su posible funcionamiento, que podría beneficiar o perjudicar a los usuarios finales, incluidos los profesionales de la salud y los pacientes. Al utilizar datos de salud, estos sistemas podrían tener acceso a información personal sensible, por lo que requieren de marcos jurídicos y regulatorios sólidos para salvaguardar la privacidad, la seguridad y la integridad. Esto es lo que la presente publicación pretende ayudar a plantear y mantener.

En respuesta a las crecientes necesidades de los países de regular responsablemente el rápido surgimiento de las tecnologías de la salud basadas en la inteligencia artificial, la publicación destaca seis áreas:

  • Con el fin de fomentar la confianza, subraya la importancia de la transparencia y la documentación, lo que se traduce en documentar el ciclo completo de vida del producto y registrar los procesos de su desarrollo.

  • En cuanto a la gestión de los riesgos, hay cuestiones como el «uso previsto», el «aprendizaje continuo», las intervenciones humanas, los modelos de entrenamiento y las amenazas a la ciberseguridad que deben mejorarse de manera exhaustiva y simplificarse lo máximo posible.

  • La validación externa de los datos y la claridad sobre el uso previsto de la inteligencia artificial ayudan a salvaguardar la seguridad y facilitan la regulación.

  • El compromiso con la calidad de los datos, que puede demostrarse mediante la evaluación rigurosa de los sistemas previa a sus lanzamientos, es vital para asegurarse de que los sistemas no extiendan los sesgos y la desinformación.

  • Los retos que plantean las regulaciones complejas e importantes, como el Reglamento General de Protección de Datos en Europa y la Ley de Portabilidad y Responsabilidad del Seguro Médico en los Estados Unidos de América, se abordan con un énfasis en la comprensión del alcance de la jurisdicción y los requisitos para el consentimiento, al servicio de la privacidad y la protección de datos.

  • Promover la colaboración entre los organismos reguladores, pacientes, profesionales de la salud, representantes de las industrias y los asociados gubernamentales puede ayudar a asegurarse de que los productos y servicios cumplan con las regulaciones a lo largo de sus ciclos de vida.

    Los sistemas de inteligencia artificial son complejos y no solo dependen del código con el que se fabriquen; también influyen los datos con los que son entrenados, que provienen de entornos clínicos e interacciones entre usuarios, entre otros. La mejora de la regulación puede ayudar a controlar los riesgos de que la inteligencia artificial extienda sesgos existentes en los datos de entrenamiento.

    La nueva publicación de la OMS pretende exponer principios clave que los gobiernos y las autoridades reguladoras pueden seguir para desarrollar nuevas pautas sobre la inteligencia artificial o adaptar las ya existentes, a nivel nacional o regional.

    Fuente: ONU 19 de octubre de 2023