CEIEG.


ONU – La desigualdad de género obstaculiza los esfuerzos mundiales para acabar con el sida

La desigualdad de género obstaculiza los
esfuerzos mundiales para acabar con el sida

  • El año pasado, 650 000 personas murieron de sida y 1,5 millones adquirieron el VIH, el virus que causa la enfermedad.

    El estudio, publicado en vísperas del Día Mundial del SIDA que se celebra el 1 de diciembre de 2022, muestra cómo la desigualdad de la mujer y las normas de género perjudiciales están bloqueando el fin de la pandemia de sida, con un aumento de las nuevas infecciones y la continuación de las muertes en muchas partes del planeta.

    Según el informe Las desigualdades peligrosas, en las zonas con una alta carga de VIH, las mujeres que sufren violencia de pareja tienen hasta un 50% más de posibilidades de contraer el virus. Durante el período comprendido entre 2015 y 2021, solo el 41% de las mujeres casadas de entre 15 y 24 años de 33 países podían tomar sus propias decisiones en materia de salud sexual.

    Los efectos que la desigualdad de género presentan en los riesgos que corren las mujeres frente al VIH son especialmente pronunciados en el África subsahariana, donde las mujeres representaron el 63% de las nuevas infecciones por VIH en 2021.

    Además, las adolescentes y las mujeres jóvenes de entre 15 y 24 años de la región tienen tres veces más probabilidades de contraer el VIH que sus homólogos masculinos.

    El factor determinante es el poder, afirman los responsables de ONUSIDA, citando un estudio que muestran cómo la vulnerabilidad de las niñas a la infección por el VIH se reduce hasta en un 50% si se les permite permanecer en la escuela y completar la educación secundaria.

    En forma general, la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye:

    La desigualdad en el acceso al tratamiento entre los adultos y los niños también están frenando la respuesta al sida. Aunque más de las tres cuartas partes de los adultos que viven con el VIH reciben terapia antirretrovírica, poco más de la mitad de los niños reciben este medicamento que salva vidas.

    El año pasado, los niños representaron sólo el 4% de las personas que viven con el VIH, pero el 15% de todas las muertes relacionadas con el SIDA.

    El informe también revela que la lucha contra la desigualdad es posible.

    El informe muestra además que la financiación de los donantes está contribuyendo a impulsar una mayor financiación por parte de los gobiernos.

    Sin embargo, se necesitan urgentemente nuevas inversiones para hacer frente a las desigualdades, especialmente en un momento en que muchos países más ricos están recortando la ayuda a la salud mundial.

    Aumentar el apoyo es fundamental para volver a poner en marcha la respuesta al sida.

    Fuente: ONU 29 de noviembre de 2022