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Jueves, 4 de mayo de 2023

Día Internacional del Combatiente de Incendios Forestales

  • Mujeres y hombres enfrentan con singular valor el elemento abrasador en bosques, matorrales y pastizales.

    La historia registra la prevención y combate de los incendios forestales en México, desde la época de la Colonia, a partir de 1803, cuando Carlos V emitió el decreto de ordenanza que obligaba a combatir el fuego que arrasaba los bosques. A principios del siglo XX, Miguel Ángel de Quevedo, el “Apóstol del Árbol”, sentó las bases de la prevención y el combate de incendios forestales.

    La Comisión Nacional Forestal (Conafor), en conjunto con los tres órdenes de gobierno, los dueños y poseedores de los terrenos forestales, así como la sociedad civil organizada, han venido realizando acciones encaminadas a reducir la afectación a la superficie forestal ocasionado por incendios forestales dañinos.

    Lo anterior lo menciona la Conafor en el Programa de Manejo del Fuego 2020-2024, y señala que este proceso implica el entendimiento del fuego desde un punto de vista ecológico, cultural y técnico, lo que reúne tres conceptos: una aplicación técnica que involucra una presupresión del fuego, prevención, supresión y uso del fuego; una cultura del fuego que considera necesidades e impactos socioeconómicos, y la ecología del fuego que es el entendimiento del fuego como un factor que es parte integral de la dinámica en los ecosistemas.

    Las y los combatientes forestales han sido en todo el mundo el baluarte para detener las llamas del fuego, y las aniquilan aun a costa de su integridad personal, e incluso de su propia vida, con el fin de proteger a la naturaleza y la vida de las personas que habitan en los entornos boscosos.

    La Country Fire Authority y la Comunidad de Victoria fijaron el 4 de mayo para esa conmemoración y adoptaron el uso de una cinta roja, a la que después se agregó el color azul para simbolizar los elementos fuego y agua, en reconocimiento a los combatientes forestales muertos y sus familias, homenaje que la comunidad internacional acogió.

    México se unió a ese homenaje, y el 3 de marzo de 2014 el gobierno publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto mediante el cual se dedica en el país el 11 de julio para honrar a mujeres y hombres que combaten el fuego forestal.

    En un país tan vasto como México, con importantes masas forestales, mujeres y hombres participan en la loable tarea de combatir las llamas en bosques, matorrales y pastizales. Previo a la temporada de incendios forestales, en los seis centros regionales de Manejo del Fuego (CRMF) de la Conafor en los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Jalisco, Puebla y Campeche, se preparan física, técnica y anímicamente para acudir a donde sean requeridos sus servicios, no sólo en territorio nacional sino en conflagraciones sucedidas en otros países donde han sobresalido por su arrojo, conocimiento y desempeño.

    Honremos a estos heroicos compatriotas que combaten cuerpo a cuerpo al elemento abrasador que es el fuego forestal.

    Fuente: SEMARNAT 04 de mayo de 2023

  • Lunes, 29 de agosto de 2022

    Día Internacional contra los Ensayos Nucleares

  • Hemos pasado de más de 2000 ensayos nucleares entre los años 1945 y 1996 a una decena desde que el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares fuera aprobado por la Asamblea General. Solo un país ha realizado ensayos en este milenio.

    Desde que los ensayos nucleares empezaron en 1945, se han ejecutado más de 2000 pruebas, dejando consecuencias devastadoras para la humanidad.

    La historia nos ha demostrado que las tragedias humanas y medioambientales resultantes de los ensayos nucleares justifican la necesidad de conmemorar el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, más aún teniendo en cuenta que las armas atómicas contemporáneas son cada vez más poderosas y destructivas.

    Ante esta creciente amenaza, el 2 de diciembre de 2009, la Asamblea General aprobó por unanimidad su resolución 64/35 en donde se declara el 29 de agosto como el Día Internacional contra los Ensayos Nucleares. La resolución, que fue propuesta por la República de Kazajstán, apoyada por otros países, tenía como finalidad celebrar la clausura del polígono de ensayos nucleares de Semipalátinsk, la cual ocurrió ese mismo día de agosto en 1991.

    La primera conmemoración de este día fue celebrada en 2010 y desde entonces, a lo largo de esa jornada y sus vísperas, se organizan diversas actividades en todo el mundo, tales como simposios, conferencias, exposiciones, concursos, publicaciones, ponencias, programas de televisión y radiodifusión y otras iniciativas.

    Posteriormente a este esfuerzo, en octubre de 2013, “convencida de que el desarme nuclear y la eliminación total de las armas nucleares constituyen la única garantía absoluta contra el empleo o amenaza del empleo de armas nucleares”, la Asamblea General en su resolución A/RES/68/32, declaró el 26 de septiembre Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares, con la finalidad de fomentar iniciativas internacionales para lograr la desaparición total del armamento nuclear.

    La primera celebración de este día en 2014, junto con otras actividades e iniciativas, ha contribuido a crear un ambiente internacional que apuesta con firmeza por alcanzar un mundo sin armas nucleares.

    Los desafíos persisten, ya que el instrumento internacional que las impediría, el “Tratado de prohibición completa de los ensayos nucleares (TPCEN)” (de 1996), desafortunadamente, no ha entrado todavía en vigor.

    El 2 de diciembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su sexagésimo cuarto período de sesiones, declaró el 29 de agosto Día Internacional contra los Ensayos Nucleares mediante la aprobación por unanimidad de la resolución 64/35. En el preámbulo de la resolución se hace hincapié en que «debe hacerse todo lo posible para poner fin a los ensayos nucleares con el fin de evitar efectos devastadores y perjudiciales para la vida y la salud de las personas y para el medio ambiente» y en que “la cesación de los ensayos nucleares es uno de los medios fundamentales para lograr el objetivo de un mundo libre de armas nucleares”.

    El principal mecanismo para la erradicación de los ensayos de armas nucleares es el Tratado de prohibición completa de los ensayos nucleares (TPCE), que fue aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 10 de septiembre de 1996. Hasta la fecha, 186 Estados han firmado el Tratado y 174 lo han ratificado. Para que el tratado entre en vigor debe ser ratificado por aquellos Estados que poseen capacidades nucleares importantes.

    Si bien la comunidad internacional está de acuerdo con que los ensayos de armas nucleares ponen en peligro la vida, todavía existe, hasta cierto punto, entre los Estados el recelo frente a la posibilidad de que se realicen ensayos clandestinos. También existe el temor de que, si no se hacen ensayos, las armas nucleares dejen de ser fiables. Sin embargo, a lo largo de los años, los progresos científicos y tecnológicos han avanzado de manera exponencial, aumentando la capacidad de supervisar y verificar los mecanismos de fiscalización, así como de detectar la proliferación de armas nucleares. Estas actividades e instrumentos de vigilancia fueron propuestos y elaborados por la Secretaría Técnica Provisional de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (OTPCE). A pesar del estancamiento del proceso de ratificación, una sensibilización pública cada vez mayor, incluidas las actividades del Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, presiona a los Estados para que firmen el Tratado con el fin de erradicar definitivamente estos ensayos.

    La Comisión Preparatoria de la OTPCE y los 174 países que han ratificado el tratado continúan promoviendo la entrada en vigor del mismo. El singular sistema de vigilancia de la OTPCE, que ya incluye más del 90% de los países signatarios, garantiza a los Estados que ninguna explosión nuclear pasará indetectada.

    Sin embargo, nada contribuiría más a evitar una guerra nuclear o la amenaza del terrorismo nuclear que la eliminación de los ensayos nucleares. Y es que, el final irreversible de las explosiones nucleares es la única manera de prevenir el desarrollo futuro de las armas nucleares.

    Fuente: ONU 29 de agosto de 2022

  • Miércoles, 5 de mayo de 2021

    Migración Internacional en México a través de las
    Encuestas sobre Migración en las Fronteras Norte y Sur

    Las encuestas en sí mismas inscriben una gran complejidad conceptual y en su levantamiento, rasgos a los que hay que añadir que durante 2020, se instrumentaron medidas de distanciamiento social para controlar la pandemia.

     

    Fuente: CONAPO 03 de mayo de 2021

    Martes, 9 de marzo de 2021

    Los sistemas alimentarios representan más de un tercio
    de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero

  • Una nueva herramienta de datos ofrece información detallada acerca del papel de la utilización de la tierra, la agricultura, la refrigeración y el envasado, entre otros aspectos, brindando así orientación crucial para los esfuerzos de mitigación integral

    A tenor de un nuevo estudio pionero publicado en Nature Food, los sistemas alimentarios del planeta son responsables de más de un tercio de las emisiones antropógenas mundiales de gases de efecto invernadero (GEI).

    Según los cálculos, las emisiones procedentes de los sistemas alimentarios, desde las derivadas del cambio del uso de la tierra y la producción agrícola hasta del envasado y la gestión de residuos, ascendieron a 18 000 millones de toneladas de equivalente de dióxido de carbono en 2015. Esto constituye el 34 % del total, un porcentaje que ha ido disminuyendo gradualmente -respecto del 44 % alcanzado en 1990-, aun cuando dichas emisiones siguieron aumentando en términos absolutos.

    El estudio, elaborado por el Sr. Francesco Tubiello, un estadístico superior y especialista en cambio climático de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en colaboración con investigadores del Centro Común de Investigación de la Comisión Europea en Ispra (Italia), brinda una mina de datos y, no menos importante, permite presentar una nueva base de datos -EDGAR-FOOD- que se remontan a 1990 y que posibilitan un seguimiento detallado de las tendencias futuras y en curso. La nueva herramienta, que cuenta con los principales datos de FAOSTAT sobre la utilización de la tierra, proporciona una serie de datos completa y coherente sobre múltiples sectores que resultarán fundamentales en el diseño de medidas eficaces de mitigación y vías de transformación hacia sistemas alimentarios sostenibles.

    Asimismo, aporta estimaciones y un conocimiento más precisos de los efectos sobre el clima que tienen la producción, la distribución y el consumo de alimentos, de cara a la emblemática Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios que se celebrara más adelante este año. En el Informe especial sobre el cambio climático y la tierra del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático se atribuyeron recientemente entre 11 000 millones y 19 000 millones de toneladas de emisiones al año, un amplio margen, lo que subraya la necesidad de colmar nuestras lagunas de conocimiento.

    La base de datos EDGAR-FOOD representa un hito para entender el modo en que se ha desarrollado el sistema alimentario mundial. Permite realizar evaluaciones sobre la forma en que los cambios en el comportamiento del consumidor o la evolución tecnológica podrían repercutir en las emisiones de GEI derivadas de los sistemas alimentarios y puede servir como valiosa herramienta para los investigadores que se centren en sectores específicos, así como los responsables de las políticas encargados de formular estrategias de mitigación que no se limiten a traspasar las emisiones a otros sectores.

    La FAO cuenta con potentes conjuntos de datos sobre las emisiones relativas a la agricultura y la utilización de la tierra y está creando otro para contribuir a la labor de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios.

    Principales Conclusiones

    Unos dos tercios de las emisiones derivadas de los sistemas alimentarios mundiales provienen del sector relacionado con la tierra, que comprende la agricultura, la utilización de la tierra y los cambios que se producen en dicha utilización. Esa cifra es más elevada en el caso de los países en desarrollo, pero, con la disminución de la deforestación y el aumento de las actividades de los eslabones finales de la cadena de producción, como la elaboración y la refrigeración de alimentos, también ha ido descendiendo de manera considerable.

    Por lo que respecta a su porcentaje de todas las emisiones de GEI antropógenas, los sistemas alimentarios de los países industrializados se mantienen estables en líneas generales, aproximadamente en el 24 %, mientras que en los países en desarrollo este ha bajado notablemente -debido en parte a unos incrementos muy elevados de las emisiones no alimentarias- hasta el 39 % en 2015 respecto del 68 % en 1990.

    En la investigación se pone de relieve la manera en que los sistemas alimentarios mundiales consumen cada vez más energía, lo que refleja las tendencias en los sectores minorista y de envasado, transporte y elaboración, cuyas emisiones están creciendo rápidamente en algunos países en desarrollo. Mientras tanto, en los países industrializados ha aumentado la emisión de GEI fluorados -que tienen un efecto turbocompresor sobre el calentamiento global- utilizados en refrigeración y otras aplicaciones industriales. La refrigeración es responsable de casi la mitad del consumo de energía del sector minorista y de los supermercados, cuyas emisiones en Europa han aumentado más de cuatro veces desde 1990. Las actividades a nivel mundial de la “cadena de frío” representan en torno al 5 % de las emisiones mundiales de los sistemas alimentarios, una cifra que se prevé que se incremente.

    Asimismo, se reveló que el envasado contribuye actualmente con un 5,4 % de las emisiones mundiales de los sistemas alimentarios, más que cualquier otro factor de la cadena de suministro, incluido el transporte. Sin embargo, la intensidad de las emisiones varía notablemente según el producto: el vino y la cerveza representan un porcentaje significativo de los efectos del envasado, mientras que los plátanos y el azúcar de remolacha generan mayores emisiones a causa del transporte.

    En promedio, las emisiones mundiales anuales per cápita relacionadas con los alimentos han disminuido alrededor de un tercio, hasta las 2 toneladas de CO2 equivalente. Esa cifra no debería interpretarse como la “huella de consumidor”, ya que esta última varía según los hábitos dietéticos específicos, pero puede usarse como indicador de los esfuerzos nacionales de mitigación para reducir las emisiones de GEI derivadas del sistema alimentario en conjunto.

    Fuente: FAO 09 de marzo de 2021

  • Martes, 9 de marzo de 2021

    Violencia contra la mujer

    Datos y Cifras

  • La violencia contra la mujer -especialmente la ejercida por su pareja y la violencia sexual- constituye un grave problema de salud pública y una violación de los derechos humanos de las mujeres.

  • Las estimaciones mundiales publicadas por la OMS indican que alrededor de una de cada tres (35%) mujeres en el mundo han sufrido violencia física y/o sexual de pareja o violencia sexual por terceros en algún momento de su vida.

  • La mayoría de estos casos son violencia infligida por la pareja. En todo el mundo, casi un tercio (30%) de las mujeres que han tenido una relación de pareja refieren haber sufrido alguna forma de violencia física y/o sexual por parte de su pareja en algún momento de su vida.

  • La violencia puede afectar negativamente la salud física, mental, sexual y reproductiva de las mujeres y, en algunos entornos, puede aumentar el riesgo de contraer el VIH.

    Las estimaciones más precisas relativas a la prevalencia de la violencia de pareja y la violencia sexual se derivan de las encuestas poblacionales basadas en los testimonios de las víctimas. En un análisis llevado a cabo en 2013 por la OMS en colaboración con la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres y el Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica, en el que se utilizaron los datos de más de 80 países, se observó que, en todo el mundo, una de cada tres mujeres (o el 35%) había sido objeto de violencia física o violencia sexual bien dentro o fuera de la pareja.

    Casi un tercio (30%) de todas las mujeres que han tenido una relación ha sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja. Las estimaciones de prevalencia de la violencia de pareja oscilan entre el 23,2% en los países de ingresos altos y el 24,6% en la región del Pacífico Occidental, al 37% en la región del Mediterráneo Oriental y el 37,7% en la región de Asia Sudoriental.

    El 38% de los feminicidios que se cometen en el mundo son perpetrados por la pareja. Además de la violencia de pareja, el 7% de las mujeres refieren haber sufrido agresiones sexuales por personas distintas de su pareja, si bien los datos a ese respecto son más escasos. Los actos de violencia de pareja y violencia sexual son cometidos en su mayoría por hombres contra mujeres.

    La violencia de pareja (física, sexual y emocional) y la violencia sexual ocasionan graves problemas de salud física, mental, sexual y reproductiva a corto y largo plazo a las mujeres. También afecta a sus hijos y tiene un elevado costo social y económico para la mujer, su familia y la sociedad.

    Repercusión en los niños

  • Los niños que crecen en familias en las que hay violencia pueden sufrir diversos trastornos conductuales y emocionales. Estos trastornos pueden asociarse también a la comisión o el padecimiento de actos de violencia en fases posteriores de su vida.

  • La violencia de pareja también se ha asociado a mayores tasas de mortalidad y morbilidad en los menores de 5 años (por ejemplo, por enfermedades diarreicas o malnutrición).

    Los costos sociales y económicos de este problema son enormes y repercuten en toda la sociedad. Las mujeres pueden llegar a encontrarse aisladas e incapacitadas para trabajar, perder su sueldo, dejar de participar en actividades cotidianas y ver menguadas sus fuerzas para cuidar de sí mismas y de sus hijos.

    Cada vez hay más estudios bien concebidos sobre la eficacia de los programas de prevención y respuesta. Se necesitan más recursos que refuercen la prevención y la respuesta frente a la violencia de pareja y la violencia sexual, en particular en el ámbito de la prevención primaria, a fin de impedir que llegue a producirse.

    Existen datos procedentes de los países de ingresos altos que indican que las intervenciones de sensibilización y la prestación de orientación psicológica para mejorar el acceso a los servicios dirigidos a las víctimas de violencia de pareja son eficaces a la hora de reducir dicha violencia. Los programas de visitas domiciliarias en que participan los servicios periféricos de salud por medio de profesionales de enfermería capacitados también parecen prometedores a efectos de reducir la violencia de pareja. No obstante, aún han de evaluarse para poder ser utilizados en entornos con pocos recursos.

    Entre las estrategias de prevención que podrían dar buenos resultados en entornos de bajos recursos cabe citar las siguientes: aquellas que permiten que la mujer se emancipe económica y socialmente mediante una combinación de microfinanciación y formación en materia de igualdad de género; las que fomentan la comunicación y las relaciones interpersonales dentro de la pareja y la comunidad; las que reducen el acceso al alcohol y su uso nocivo; las que transforman las normas sociales y de género nocivas, mediante la movilización de la comunidad y la educación grupal y participativa de mujeres y hombres con el fin de provocar una reflexión crítica sobre las relaciones de género y de poder desiguales.

    https://youtu.be/NAlY-1KI6ts

    Fuente: OIT 09 de marzo de 2021

  • Martes, 9 de marzo de 2021

    La violencia contra la mujer es omnipresente y
    devastadora: la sufren una de cada tres mujeres

  • La OMS advierte de que las mujeres jóvenes se encuentran entre las que más riesgo corren

    Los nuevos datos hechos públicos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y sus asociados demuestran que la violencia contra la mujer continúa siendo un problema generalizado y devastador y que se empieza a sufrir a edades alarmantemente tempranas. Cerca de 736 millones de mujeres (es decir, una de cada tres) sufren violencia física o sexual infligida por un compañero íntimo o agresiones sexuales perpetradas por otras personas, unas cifras que se han mantenido estables a lo largo del decenio más reciente.

    Esta violencia empieza temprano: una de cada cuatro mujeres de entre 15 y 24 años que han mantenido alguna relación íntima habrán sido objeto de las conductas violentas de un compañero íntimo cuando cumplan 25 años.

    Alrededor de 641 millones de mujeres en el mundo sufren actos violentos perpetrados por un compañero íntimo. Esta forma de violencia es, con diferencia, la más frecuente que sufren las mujeres. Sin embargo, el 6% de las mujeres refieren haber sido agredidas sexualmente por personas que no son ni su marido ni un compañero íntimo. Si tenemos en cuenta el alto grado de estigmatización y el hecho de que muchos abusos sexuales no se denuncian, es probable que, en la práctica, estas cifras sean mucho mayores.

    Este informe, que presenta datos obtenidos en el mayor estudio realizado hasta la fecha sobre la prevalencia de la violencia contra las mujeres, ha sido realizado por la OMS por encargo de un grupo de trabajo especial de las Naciones Unidas. Se basa en datos que corresponden al periodo comprendido entre 2000 y 2018 y aporta nuevas estimaciones después de las más recientes publicadas en 2013.

    Cabe señalar que, si bien las cifras publicadas revelan tasas alarmantemente altas de violencia contra las mujeres y las niñas, no reflejan el impacto que la pandemia de COVID-19 está teniendo en la actualidad.

    Las mujeres que viven en países de ingresos bajos y en la franja de países de menores ingresos dentro del grupo de países de ingresos intermedios sufren esta violencia de forma desproporcionada. Según los cálculos, el 37% de las mujeres de los países más pobres han sido objeto de violencia física y/o sexual por parte de un compañero íntimo en algún momento de su vida, y en algunos de estos países la prevalencia llega a ser de una de cada dos mujeres.

    Todas las formas de violencia que sufre una mujer pueden afectar a su salud y su bienestar durante el resto de su vida, incluso mucho tiempo después de ocurridas. Las víctimas corren mayor riesgo de presentar lesiones, depresión, trastornos de ansiedad, embarazos no deseados, infecciones de transmisión sexual (incluida la infección por el VIH) y muchos otros problemas de salud. Además, se trata de un problema que afecta a la sociedad en su conjunto y conlleva unos costos enormes que repercuten en el desarrollo general y en los presupuestos de los países.

    Para prevenir la violencia es preciso solventar las desigualdades económicas y sociales sistémicas, velar por el acceso a la educación y al trabajo seguros e introducir cambios en las normas y las instituciones que discriminan por motivos de género. Hay también otras intervenciones eficaces, como los programas aplicados para garantizar la disponibilidad de servicios esenciales para las mujeres que han sobrevivido a actos violentos, prestar apoyo a las organizaciones de mujeres, hacer frente a las normas sociales que perpetúan las desigualdades, reformar las leyes discriminatorias y potenciar los mecanismos jurídicos pertinentes, entre muchas otras.

    Fuente: OIT 09 de marzo de 2021

  • Lunes, 7 de diciembre de 2020

    Lanzan el mayor llamamiento humanitario para preservar
    la salud sexual y reproductiva de 54 millones de mujeres

  • En el marco de la pandemia de COVID-19, El UNFPA solicita 818 millones de dólares para asistencia humanitaria a mujeres y jóvenes en 68 países. La ayuda también incluye asistencia contra la violencia de género.

    En el mayor llamamiento humanitario de su historia, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) pidió este lunes a la comunidad internacional de donantes reunir 818 millones de dólares para llevar asistencia vital a 54 millones de mujeres, niñas y jóvenes en 68 países a lo largo de 2021.

    La ayuda – que incluiría servicios de salud sexual y reproductiva, así como de protección de la violencia de género y apoyo a sus víctimas -, buscaría contrarrestar la interrupción de esos servicios básicos toda vez que los sistemas de salud han concentrado sus recursos y atención en la pandemia de COVID-19.

    La agencia de la ONU subrayó, en este contexto, la escalada de la violencia doméstica y de género y la creciente urgencia de brindar servicios psicosociales durante la crisis sanitaria.

    Si bien su plan de acción humanitaria para el año entrante abarca 68 países, el UNFPA destacó las naciones donde es mayor la emergencia:

    Yemen: Como consecuencia del conflicto, más del 80% de la población, incluido más de un millón de mujeres embarazadas – muchas de ellas gravemente desnutridas -, precisa alguna forma de asistencia. Sólo la mitad de las instalaciones de salud permanecen funcionales y las denuncias de violencia de género han aumentado. La intención es asignarle 100 millones de dólares.

    Siria: Tras una década de conflicto, más de once millones de personas necesitan asistencia y 5,7 se han refugiado en los países vecinos. Las mujeres y las niñas son especialmente vulnerables y el UNFPA trabaja con socios en el terreno para llevarles servicios de salud sexual y reproductiva y suministros básicos. La partida planeada para el país es de 81 millones de dólares.

    República Democrática del Congo: La agencia de la ONU promueve la coexistencia pacífica entre comunidades con énfasis en las mujeres y jóvenes. También ha establecido líneas de ayuda para las víctimas de violencia de género. Los fondos para este país sumarían 67 millones de dólares.

    Sudán: De los 12,7 millones de personas que precisan asistencia, casi 300.000 son mujeres embarazadas y apenas un tercio de los centros de salud cuenta con servicios de obstetricia. La asistencia para la violencia de género tampoco es fácil de encontrar. El UNFPA destinará 40 millones de dólares a Sudán.

    Venezuela y países de acogida de refugiados venezolanos: Las medidas para frenar la propagación del COVID-19 han interrumpido el acceso a los servicios básicos y han hecho que decenas de miles de personas que habían migrado regresen a Venezuela. El UNFPA trabaja para garantizar la continuidad de los servicios de salud sexual y reproductiva y para reducir el riesgo de violencia de género entre las niñas, mujeres y comunidades de acogida. La agencia proyecta otorgar a esta emergencia 27 millones de dólares.

    Fuente: ONU 07 de diciembre de 2020

  • Miércoles, 25 de noviembre de 2020

    Basta de violencia contra la mujer, dice la ONU
    en la jornada internacional contra ese flagelo

  • Liderados por el ente dedicado a las mujeres, el sistema de las Naciones Unidas pugna por poner fin a la violencia de género de una vez por todas y afirma que esto puede lograrse con voluntad. En el contexto de la pandemia de COVID-19, la violencia contra las mujeres es “una pandemia a la sombra de otra”, alerta la ONU.

    Una de cada tres mujeres en el mundo sufre violencia sexual o física, la mayor parte de las veces a manos de su pareja. Aún así, sólo dos de cada tres países han prohibido la violencia doméstica, en 37 no se juzga a los violadores si están casados o si se casan posteriormente con la víctima y en otros 49 no existe una legislación que proteja a las mujeres de ese lastre.

    Desde que surgió el brote de COVID-19, los nuevos datos e informes de los trabajadores de primera línea revelan que la violencia contra las mujeres y las niñas se ha agudizado, sobre todo cuando ocurre en el hogar.

    En el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Phumzile Mlambo-Ngcuka, directora ejecutiva de ONU Mujeres, destacó la diferencia en la respuesta que las sociedades y los servicios públicos dan a las personas que contraen una enfermedad que podría ser mortal y a las que piden ayuda porque sus parejas amenazan su salud o su vida.

    Según los datos de ONU Mujeres, sólo el año pasado, 243 millones de mujeres y niñas sufrieron violencia sexual o física por parte de sus parejas. Este año, las denuncias de violencia contra mujeres y niñas en el ámbito privado, el ciberacoso, los matrimonios infantiles y el acoso y la violencia sexuales han aumentado.

    “Las mujeres deben gozar de pleno acceso a la justicia, procedimientos judiciales confiables y prevención efectiva de los delitos”, recalcó, añadiendo que menos del 40% de las mujeres víctimas de delitos violentos denuncian estas agresiones por desconfianza en la respuesta que obtendrán del sistema.

    Mlambo-Ngcuka afirmó que el cambio debe empezar en las facultades de Derecho y las academias de policía, enseñándole a sus estudiantes a reconocer e intervenir en casos de maltrato. “Implica erradicar la impunidad, con marcos jurídicos y políticos sólidos y con datos para registrar los avances y exigir cuentas de la sociedad y de las autoridades”, apuntó.

    “La economía de la violencia es simple y devastadora. Nadie sale ganando. Todas las personas perdemos. Debemos revertir esta situación”, enfatizó la directora ejecutiva y sostuvo que esto se puede lograr con voluntad.

    Hace 20 años, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución en la que designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre este flagelo y de impulsar medidas para ponerle fin.

    Hasta la fecha, sólo dos de cada tres países han prohibido la violencia doméstica, mientras que en 37 Estados todavía no se juzga a los violadores si están casados o si se casan posteriormente con la víctima. Además, en otros 49 Estados no existe aún una legislación que proteja a las mujeres de la violencia doméstica.

    Para amplificar su llamado a acabar con la violencia contra las mujeres, el Día Internacional marca el principio de la campaña anual 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género, que termina el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.

    Fuente: ONU 25 de noviembre de 2020

  • Miércoles, 25 de noviembre de 2020

    Preocupa la persistencia de la violencia contra las mujeres y niñas
    en la región y su máxima expresión, el feminicidio o femicidio

  • La estrategia para enfrentar de forma urgente esta verdadera “pandemia en la sombra” debe basarse en cuatro pilares: financiamiento, prevención, respuesta y recopilación de datos.

    La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) manifestó hoy su preocupación por la persistencia de la violencia por razones de género contra las mujeres y las niñas de la región y por las altas tasas de feminicidio observadas. Según los últimos datos oficiales reportados al Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG) de la Comisión, en 2019 se registraron 4.640 casos de feminicidio en 24 países, 18 latinoamericanos y 6 caribeños.

    La situación de las mujeres y las niñas se ha visto agravada durante el confinamiento y las restricciones de movilidad dispuestas por los países frente al COVID-19, que limitaron su acceso a redes de apoyo y servicios de atención, plantea la CEPAL en un documento publicado en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que se conmemora cada 25 de noviembre, y que da inicio a 16 días de activismo hasta el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.

    “La violencia de género ocurre de forma sistemática en nuestra región. No conoce fronteras, afecta a mujeres y niñas de todas las edades y sucede en todos los espacios: en los lugares de trabajo, en el marco de la participación política y comunitaria, en el transporte y en la calle, en la escuela y en los centros educativos, en el ciberespacio y, sin duda, en los propios hogares. Es lo que en el sistema de las Naciones Unidas hemos llamado una ‘pandemia en la sombra’”, señaló la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL.

    De acuerdo con encuestas nacionales de seis países de la región, entre el 60% y el 76% de las mujeres (alrededor de 2 de cada 3) ha sido víctima de violencia por razones de género en distintos ámbitos de su vida. Además, en promedio 1 de cada 3 mujeres ha sido víctima o vive violencia física, psicológica y/o sexual, por un perpetrador que era o es su pareja, lo que conlleva el riesgo de la violencia letal: el feminicidio o femicidio.

    Los gobiernos de la región han informado al Observatorio COVID-19 en América Latina y el Caribe de la CEPAL más de 90 medidas para enfrentar la violencia contra las mujeres en este período. Se destaca la respuesta de países donde la totalidad o parte de los servicios de atención a este flagelo fueron declarados esenciales. Sin embargo, la adaptación a modalidades remotas ha sido muy compleja y limita el acceso a la justicia, lo que aumenta el riesgo de impunidad que afecta a estos delitos, alerta la CEPAL.

    El documento señala que “la gran cantidad de denuncias en líneas remotas y de forma presencial exige fortalecer la acción pública con aumento de recursos fiscales y medidas que garanticen la atención integral en servicios sociales y acceso a la justicia a través de canales activos y expeditos”.

    “Para superar la violencia por razones de género contra las mujeres y las niñas se requiere de políticas que aborden los nudos estructurales de la desigualdad, principalmente los derivados de los patrones culturales patriarcales discriminatorios y violentos”, dice la CEPAL. “Urge avanzar en forma integral y acelerada en la garantía de los derechos y la autonomía de las mujeres en sus dimensiones económica, física y en la toma de decisiones”.

     

    Fuente: CEPAL 24 de noviembre de 2020

     

  • Miércoles, 25 de noviembre de 2020

    ONU México: Poner fin a la violencia contra
    las mujeres y las niñas no está en pausa

  • El Sistema de las Naciones Unidas se une a sobrevivientes, activistas, defensoras de derechos humanos, responsables de la toma de decisiones y a toda la sociedad para destacar la necesidad de financiación, de servicios esenciales, de prevención y de generación de datos que propicien acciones efectivas para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, y para avanzar en la igualdad sustantiva.

    La violencia contra las mujeres y las niñas es una pandemia que no hemos logrado erradicar y que afecta a todos los países del mundo. En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y de la campaña Únete, la Organización de las Naciones Unidas convoca a la sociedad en su conjunto a hacer frente a otra pandemia: la violencia contra las mujeres y las niñas, la cual ha generado que en México 7 de cada 10 mujeres hayan enfrentado algún tipo de violencia.

    Las emergencias humanitarias, los desastres, las crisis económicas y las pandemias generan, para las mujeres y las niñas, mayores riesgos de padecer violencia. La pandemia de COVID-19 no es una excepción; esta es mucho más que una crisis sanitaria, se trata de una crisis global que podría revertir décadas de progreso en los derechos y la igualdad de género.

    La pandemia afecta desproporcionadamente a las mujeres y las niñas. Mientras que los hombres sufren tasas de mortalidad más altas, las mujeres se ven especialmente afectadas por las consecuencias económicas, sociales, y la violencia de género, es decir, sufren una violencia estructural que las afecta tanto en espacios privados como públicos, lo cual vulnera la garantía de sus derechos humanos.

    Por ello, bajo el lema: Pinta el mundo de naranja: ¡Financiar, responder, prevenir y recopilar!, este año la campaña ÚNETE pone énfasis en la importancia de los gobiernos y el trabajo en conjunto con el Sistema de Naciones Unidas, sociedad civil y el sector privado para generar una estrategia de compromiso político a fin de acelerar respuestas concretas en los cuatro ejes de la campaña: financiarun paquete mínimo de servicios esenciales; responder adecuadamente a las sobrevivientes para garantizar su acceso a los servicios esenciales; prevenir la violencia y modificar las normas sociales que le dan origen y la normalizan; y recopilar datos e información para construir políticas que prevengan, atiendan y sancionen la violencia estructural que viven millones de mujeres y niñas, además de la adopción de medidas en pro de la reparación, la verdad y la memoria de las mujeres víctimas de la violencia.

    Para seguir respondiendo a esta situación de urgencia, a petición del Secretario General de la ONU, el Sistema de las Naciones Unidas ha diseñado una estrategia con cuatro ejes de compromisos a fin de acelerar una respuesta de políticas públicas concretas respecto de la violencia de género en el contexto de COVID-19 y promover la política de cero tolerancia hacia la violencia en todas las esferas de la sociedad:

    1. Financiar: dar prioridad al financiamiento de un paquete de servicios esenciales que incluyan la prevención de violencia de género. Y asegurar un financiamiento flexible a las organizaciones de sociedad civil de los derechos de las mujeres que trabajan en el nexo entre COVID-19 y la violencia de género.

    2. Prevenir: declarar una política nacional de cero tolerancia hacia la violencia contra las mujeres y las niñas con un plan de acción concreto.

    3. Responder: poner especial atención sobre las víctimas y sobrevivientes, a través del paquete de servicios esenciales que incluyan el acceso a la procuración e impartición de justicia, así como a servicios sociales y de salud.

    4. Recopilar: datos del incremento en los diversos tipos y modalidades de violencia contra las mujeres, incluido el ámbito digital, con el fin de generar una política que prevenga y atienda la violencia en circunstancias específicas de confinamiento.

    El hecho de que la violencia esté tan presente, no quiere decir que sea normal ni mucho menos aceptable; a pesar de toda la devastación que ha causado, la crisis del COVID-19 también representa una oportunidad generacional para construir economías y sociedades más inclusivas, pacíficas y libres del flagelo de la violencia. Necesitamos crear una “paz feminista” que escuche la voz de todos y todas, con todos los grupos incluidos de manera plena y significativa en las decisiones que afectan sus vidas. Esto debe incluir escuchar las voces de mujeres y niñas que marchan en contra la violencia y en defensa de sus derechos, garantizando que puedan ejercer el derecho de manifestación de forma segura.

    El Foro Generación Igualdad, convocado por ONU Mujeres y copresidido por Francia y México en el 2021, representa también la oportunidad de abordar el papel clave que desempeñan las mujeres y generar estrategias para revertir esta crisis. De ahí la importancia de la contribución en la respuesta y recuperación de COVID-19 por parte de todos los gobiernos del mundo para reforzar los mecanismos de accesos a servicios y políticas de prevención y eliminación de todos los tipos de violencia.

    Las Agencias de Naciones Unidas hacemos una invitación para que, del 25 de noviembre al 10 de diciembre, durante los 16 días de activismo, las instituciones de gobierno, la sociedad civil, las universidades, el sector privado, medios de comunicación, junto con las y los jóvenes se unan a la campaña Únete para prevenir y poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas con diferentes actividades como: foros públicos, actividades culturales, el uso de prendas de vestir color naranja, declaraciones públicas llamando a poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, y usando los hashtags oficiales #DíaNaranja #16días y #Únete.

    Fuente: ONU MUJERES 25 de noviembre de 2020

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  • Miércoles, 25 de noviembre de 2020

    ONU Mujeres insta a emprender acciones concretas
    para responder a la otra pandemia en la sombra

  • Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Dieciséis Días de Activismo contra la Violencia de Género

    En un momento en que la pandemia de COVID-19 y la cultura dominante de impunidad amenazan los avances logrados en el terreno de la igualdad de género y la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas, ONU Mujeres insta a emprender acciones robustas y decididas en respuesta a esta crisis sin precedentes con ocasión del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. En el período previo al Foro Generación Igualdad –en el que los agentes mundiales asumirán nuevos y firmes compromisos para erradicar la violencia contra las mujeres–, los Gobiernos, la sociedad civil, la juventud, las y los influencers y el sector privado prestarán sus voces a los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género, una campaña de movilización global que arranca hoy y se prolongará hasta el 10 de diciembre. Juntas y juntos exigirán un cambio radical y la construcción de una “nueva normalidad” que ofrezca a todas las mujeres y niñas un futuro sin violencia.

    Incluso antes de la pandemia de COVID-19, la violencia contra las mujeres era una de las violaciones más extendidas de los derechos humanos: casi el 18% de las mujeres y niñas experimentaba violencia física o sexual por parte de una pareja íntima a lo largo de un período de 12 meses. Conforme la pandemia se aceleraba, se observó una alarmante “pandemia en la sombra” de violencia contra las mujeres, con un aumento de las tasas de violencia doméstica, pero también en las calles, en Internet y en diversos entornos. El número de llamadas a las líneas telefónicas de asistencia se quintuplicó en algunos países durante las semanas iniciales de la pandemia, mientras que en otros se redujo por la imposibilidad de las mujeres de buscar ayuda a través de los canales habituales al verse atrapadas en el hogar con sus maltratadores. De acuerdo con las proyecciones, cabe prever que la violencia alcance a 15 millones de mujeres más por cada tres meses que se mantenga el confinamiento.

    Hemos visto al mundo entero responder a la pandemia del coronavirus, trabajando al unísono, realizando grandes inversiones y utilizando protocolos con gran determinación. La violencia contra las mujeres también es una pandemia; de hecho, precede al virus y perdurará cuando este desaparezca.En un momento en que nos enfrentamos a la devastación provocada por la COVID-19, es más importante que nunca que pongamos en común nuestros recursos y asumamos un compromiso conjunto para hacer frente a los grandes desafíos y para poner fin a la violencia contra las mujeres, por el bien de todas y todos”, manifestó Phumzile Mlambo-Ngcuka, Directora Ejecutiva de ONU Mujeres.

    En respuesta a la petición de “alto al fuego en el hogar” del Secretario General de las Naciones Unidas realizada este mismo año, casi 150 países acordaron incluir la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas como un componente fundamental de sus planes de respuesta a la COVID-19. Muchos de ellos han acompañado este compromiso con un fortalecimiento de los servicios esenciales, como los refugios, las líneas telefónicas de asistencia y otros mecanismos de denuncia. Sin embargo, tan sólo 48 países, menos de la cuarta parte de los 206 analizados en el marco de un reciente estudio, trataron la violencia contra las mujeres y los servicios prestados a las niñas en este ámbito como una parte integral de sus planes nacionales y locales de respuesta a la COVID-19, y muy pocos financiaron adecuadamente estas medidas.

    Con el fin de hacer frente a esta infradotación generalizada de recursos para este problema crucial, ONU Mujeres ha convocado a la Coalición de Acción sobre la violencia de género, una innovadora alianza formada por Gobiernos, la sociedad civil, líderes juveniles, el sector privado y entidades filantrópicas para desarrollar un programa claro de acciones que impulsen la erradicación de la violencia contra las mujeres y movilicen fondos para ello. Dichas acciones e inversiones se anunciarán en el Foro Generación Igualdad que se celebrará en 2021 en México y Francia, junto con las de las otras cinco Coaliciones de Acción del Foro Generación Igualdad.

    La conmemoración oficial del Día Internacional por parte de las Naciones Unidas tendrá lugar por primera vez en formato virtual y brindará a los Estados Miembros una oportunidad para fortalecer y cumplir sus compromisos con la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas.

    Como en años anteriores, edificios y monumentos emblemáticos de todo el mundo –entre ellos, las pirámides y la Esfinge de Guiza, en Egipto; las estatuas moáis de la isla de Pascua, en Chile; el Parlamento de la República de Moldova; las Torres de Kuwait; y el Ayuntamiento de Bruselas, en Bélgica– se iluminarán de naranja para instar a un futuro mejor en el que las mujeres y las niñas puedan vivir sin violencia. En los Países Bajos se iluminarán de naranja más de 200 ayuntamientos para demostrar su solidaridad con las sobrevivientes y apoyar los 16 Días de Activismo.

    Fuente: ONU MUJERES 25 de noviembre de 2020

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  • Miércoles, 25 de noviembre de 2020

    En la mira: 16 Días de activismo contra la violencia de género

    La campaña ÚNETE de aquí al 2030 para poner fin a la violencia contra las mujeres, marca los 16 Días de activismo contra la violencia de género (del 25 de noviembre al 10 de diciembre de 2020) con el tema mundial “Pinta el mundo de naranja: ¡financiar, responder, prevenir, recopilar!”. La campaña Generación Igualdad de las Naciones Unidas amplifica el llamado a la acción mundial para subsanar las brechas de financiación, asegurar servicios esenciales para las sobrevivientes de violencia durante la crisis de la COVID-19, y concentrarse en la prevención y la recopilación de datos que puedan mejorar los servicios para salvar vidas de mujeres y niñas.

    Este año es único. Incluso antes del brote de COVID-19, la violencia contra las mujeres y las niñas había alcanzado proporciones pandémicas. En el último año, 243 millones de mujeres y niñas han sufrido maltrato por parte de sus compañeros sentimentales en todo el mundo. Mientras tanto, menos del 40 por ciento de las mujeres que sufren violencia lo denuncian o solicitan ayuda.

    Asimismo, paralelamente a la implementación de medidas de confinamiento por parte de los países para detener la propagación del coronavirus, la violencia contra las mujeres y niñas, especialmente la violencia en el ámbito privado, en algunos países, las llamadas a las líneas de ayuda se han multiplicado por cinco. En otros, las denuncias formales de violencia doméstica han disminuido por las dificultades de las supervivientes para pedir ayuda y acceder a los servicios de apoyo a través de los canales regulares.

    Sin posibilidad de acudir a la escuela y sin empleo, los cierres de escuelas y las dificultades económicas han empobrecido a las mujeres y las niñas, haciéndolas más vulnerables a la explotación, el maltrato, el matrimonio forzado y el acoso.

    Actualmente, aunque las voces de activistas y sobrevivientes han llegado a un punto en que no pueden ser silenciadas o ignoradas, el fin de la violencia contra las mujeres exigirá más inversión, más liderazgo y más medidas. No es algo que pueda quedar al margen; debe ser parte de la respuesta nacional de todos y cada uno de los países, especialmente durante la crisis actual de la COVID-19.

    Durante los 16 Días de activismo, ONU Mujeres pasa el micrófono a sobrevivientes, activistas y entidades asociadas de las Naciones Unidas sobre el terreno para que expliquen la historia de lo que ocurrió tras el brote de COVID-19.

    Fuente: ONU MUJERES noviembre de 2020

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    Miércoles, 25 de noviembre de 2020

     

     

    La pandemia en la sombra de la COVID-19

  • Recrudece la violencia contra mujeres y niñas

     

    La violencia contra las mujeres y niñas, de por sí uno de los problemas más graves que encaramos, recrudece en cualquier tipo de emergencia. La crisis ocasionada por la COVID-19 no es la excepción.

    Las cifras escapan la imaginación: incluso antes de la COVID-19, en los últimos 12 meses cerca de 243 millones de mujeres habían sido maltratadas por su pareja.

    No solo es casi seguro que ese número esté por debajo de las cifras reales — se calcula que menos del 40% de las mujeres denuncian un incidente de maltrato o buscan ayuda — sino que esa cifra se ha disparado a medida que el costo social, mental y económico del confinamiento se ha ido arraigando con el correr de los meses.

    El repunte está poniendo presión incluso en los mejores sistemas de salud y los refugios contra la violencia doméstica están alcanzando su máxima capacidad. La necesidad de redireccionar recursos normales para atender la pandemia de la COVID-19 ha agudizado los desafíos. El costo, en términos monetarios, se calcula en US$1,5 billones, y esa cifra va en aumento conforme se prolonga la pandemia.

    Los 16 Días de Activismo contra la Violencia de Género del Sistema de las Naciones Unidas se desarrollará entre el 25 de noviembre y el 10 de diciembre, bajo el lema: “Pinta el mundo de naranja: ¡Financiar, responder, prevenir, recopilar!” La campaña señalará el alcance de un problema que con demasiada frecuencia permanece oculto, y sugerirá maneras en las que los gobiernos y las comunidades pueden convertir la acción eficaz en un componente fundamental de sus planes de respuesta ante la COVID-19.

    El PNUD está urgiendo la formulación de políticas que generen un compromiso para financiación a largo plazo que apoye a las sobrevivientes, así como a los sistemas policiales y de justicia. Estamos trabajando con más de 80 países para prevenir la violencia contra mujeres y niñas y responder ante las tasas en ascenso de ese flagelo. Ello incluye asegurar que las necesidades de las sobrevivientes sean atendidas y que las mujeres participen en el proceso de construir un futuro mejor, en el que sus preocupaciones, experiencia y opiniones se incorporen en todos los niveles de respuesta y recuperación frente a la COVID-19.

    En colaboración con ONU Mujeres, el PNUD México está estableciendo plataformas telefónicas y en línea para apoyar a mujeres vulnerables en centros LUNAS, que son espacios seguros donde las mujeres reciben un estipendio mensual y, cuando procede, pueden escapar de sus agresores.

    El PNUD y ONU Mujeres han lanzado el Rastreador Mundial de Respuestas de Género COVID-19. Incluye más de 2.500 medidas en 206 países que abordan directamente la seguridad económica y social de las mujeres, así como medidas para abordar la violencia de género. Hasta el momento los resultados indican que si bien muchos países están priorizando las necesidades de las mujeres en los esfuerzos emprendidos contra la COVID-19, el esfuerzo de muchos países no ha sido suficiente, en tanto que cerca del 20% de los países no está haciendo absolutamente nada al respecto.

    En el informe del PNUD sobre la violencia de género y la COVID-19 se incluyen medidas adicionales que los organismos de las Naciones Unidas, los gobiernos y otros asociados pueden adoptar para prevenir y abordar la violencia de género en el contexto de la COVID-19.

     

     

    Fuente: PNUD 25 de noviembre de 2020

  • Lunes, 23 de noviembre de 2020

    Estadísticas a Propósito del Día Internacional
    de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

  • La generación de información estadística sobre violencia contra la mujer en encuestas especializadas como la ENIDREH, de victimización como la ENSU, así como la que se obtiene de los Censos Nacionales de Gobierno, es una actividad prioritaria para el diseño de políticas públicas para prevenir, atender y erradicar la violencia contra las mujeres.

  • De acuerdo con los datos, las mujeres con mayor propensión a experimentar violencia por cualquier agresor a lo largo de la vida son aquellas que residen en áreas urbanas (69.3%), de edades entre 25 y 34 años (70.1%), con nivel de escolaridad superior (72.6%) o bien no pertenecen a un hogar indígena (66.8 por ciento).

    En 1999, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró el 25 de noviembre Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer como un llamado a gobiernos, organismos, órganos, fondos y programas del Sistema de las Naciones Unidas, y a otras organizaciones internacionales y no gubernamentales, para llevar a cabo actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública respecto del problema de la violencia contra la mujer.

    Con motivo del Día internacional para la eliminación de la violencia contra la mujer, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) difunde este comunicado con información estadística sobre la situación de violencia que enfrentan las mujeres en nuestro país con el propósito de dimensionar y contribuir al conocimiento sobre el tema en México, y coadyuvar en el diseño y definición de acciones para prevenir, atender y eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres.

    La información se obtiene de tres instrumentos de información clave que genera el INEGI: La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2016, la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) y los registros administrativos de los Censos Nacionales de Gobierno.

    Los resultados de la ENDIREH 2016 indican que 66 de cada 100 mujeres de 15 años o más de edad que viven en el país han sufrido al menos un incidente de violencia de cualquier tipo a lo largo de la vida. El 43.9% de ellas han sufrido violencia por parte de la pareja actual o última a lo largo de su relación mientras que 53.1% ha sufrido al menos un incidente de violencia por parte de otros agresores distintos a la pareja a lo largo de la vida.

    Las mujeres con mayor propensión a experimentar violencia por cualquier agresor a lo largo de la vida son las que residen en áreas urbanas (69.3%), en edades entre 25 y 34 años (70.1%), las que cuentan con nivel de educación superior (72.6%) y las que no pertenecen a un hogar indígena (66.8 por ciento).

    De acuerdo con los resultados de la ENSU tercer trimestre 2020, se estima que entre enero y septiembre de 2020, 9% de los hogares experimentaron alguna situación de violencia familiar.

    Los Censos de Gobierno revelan que, de los presuntos delitos registrados en las averiguaciones previas iniciadas y carpetas de investigación abiertas, los principales delitos cometidos en contra de las mujeres son los relacionados con el abuso sexual (42.6%) y la violación (37.8 por ciento).

    En cuanto a la oferta institucional para la prevención y atención de la violencia contra las mujeres, el INEGI genera información que permite dimensionar los servicios. Por ejemplo, para 2020 en México existían 50 Centros de Justicia (CJM) para las Mujeres, distribuidos en 28 entidades federativas. Las entidades que cuentan con el mayor número de instancias son Coahuila (5), México y San Luis Potosí (4) y la Ciudad de México (3). Baja California, Nuevo León, Tamaulipas y Tabasco no cuentan con CJM.

    Fuente: INEGI 23 de noviembre de 2020

  • Lunes, 23 de noviembre de 2020

    La OIT celebra el compromiso constante
    del G20 a favor de proteger los medios de subsistencia

  • La protección y la creación de empleos, la protección social y el diálogo social son esenciales para minimizar los daños a largo plazo de la pandemia de COVID-19.

    El Director General de la OIT, acogió con satisfacción el compromiso de los líderes del G20 de utilizar todas las herramientas políticas disponibles para proteger la vida, el empleo y los ingresos de las personas, y para apoyar la recuperación económica mundial después de la pandemia de COVID-19 .

    La Declaración de la cumbre , citando estimaciones de la OIT, indica que la extensión temporal de las medidas de protección social durante la crisis han permitido sostener los medios de subsistencia de alrededor de 645 millones de personas.

    Ahora es vital que estas medidas se mantengan, y a la misma escala, a fin de evitar un aumento masivo del desempleo y minimizar los daños a largo plazo de la inactividad económica al mantener la relación de los trabajadores con el mercado laboral”.

    El Director General de la OIT señaló la necesidad de extender la protección social a los trabajadores de la economía informal, quienes han sido enormemente afectados durante una crisis que ha dejado al descubierto desigualdades estructurales profundamente arraigadas.

    “Los países más pobres no han tenido los recursos adecuados, y sus paquetes de estímulo fiscal sólo compensaron en mínima parte el impacto sobre el empleo. El apoyo financiero del G20 para colmar este déficit marcaría una diferencia crucial en la lucha contra la crisis, y demostraría realmente el valor de la cooperación internacional y de la solidaridad”.

    Con la pandemia revirtiendo algunos de los logros recientes en materia de igualdad de género, El Director General de la OIT dio la bienvenida al compromiso expresado en la Declaración de intensificar los esfuerzos dirigidos a eliminar las diferencias salariales por razones de género, corregir la distribución desigual de las tareas familiares no remuneradas y las responsabilidades de cuidado e incrementar la participación de las mujeres en la fuerza de trabajo. Sin embargo, señaló que es necesario hacer más para alcanzar el objetivo de Brisbane del G20 de reducir la diferencia entre las tasas de actividad de las mujeres y los hombres de 25 por ciento para 2025.

    Según estimaciones de la OIT, el equivalente a 345 millones de empleos a tiempo completo se perdieron a nivel mundial en el tercer trimestre de 2020 a causa de la pandemia. El equivalente a tantos como 225 millones de empleos a tiempo completo se perdieron tan solo en los países del G20 durante el mismo período. Muchas de las personas más afectadas son jóvenes.

    Es por ello que el Director General de la OIT expresó su satisfacción por el respaldo de los líderes del G20 a la Hoja de Ruta 2025 del G20 para la juventud. Esto contribuye a alcanzar el objetivo de reducir de 15 por ciento de aquí a 2025 el número de jóvenes expuestos al riesgo de quedar excluidos definitivamente del mercado de trabajo.

    “En vista de la gravedad de esta situación, es necesario que la economía mundial invierta en una recuperación centrada en las personas que fortalezca la capacidad de los individuos de beneficiarse del cambio, refuerce las instituciones del trabajo a fin de que todas las personas estén debidamente protegidas y favorezca los empleos del futuro, con un trabajo decente para todos”

    Fuente: OIT 22 de noviembre de 2020

  • Jueves, 19 de noviembre de 2020

    Día Mundial del Retrete

  • Más de la mitad de la población mundial, unos 4200 millones de personas, no disponen de retretes en sus viviendas o tienen sistemas de saneamiento deficientes.

    Cada 19 de noviembre se celebra el Día Mundial del Retrete para crear conciencia sobre los 4200 millones de personas que carecen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura. Se trata de adoptar medidas que permitan dar respuesta a la crisis de saneamiento mundial y lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6, cuya finalidad es garantizar la disponibilidad de agua y saneamiento para todos de aquí a 2030.

    Este año el tema destaca la importancia del “Saneamiento sostenible y el cambio climático.

    El cambio climático está empeorando. Las inundaciones, la sequía y el aumento del nivel del mar amenazan los sistemas de saneamiento, desde los inodoros hasta las fosas sépticas y las plantas de tratamiento. Las inundaciones puede contaminar los pozos utilizados para el agua potable o pueden dañar los inodoros y esparcir los desechos humanos a las comunidades y cultivos alimentarios, causando enfermedades crónicas y mortales.

    Todos deben tener un saneamiento sostenible, junto con agua potable e instalaciones para lavarse las manos, para ayudar a proteger y mantener la seguridad de nuestra salud y detener la propagación de enfermedades infecciosas mortales como COVID-19, cólera y tifoidea.

    ¡Los baños también pueden ayudarnos a combatir el cambio climático! Las aguas residuales y los lodos de los inodoros contienen recursos valiosos como agua, nutrientes y energía. Los sistemas de saneamiento sostenible hacen un uso productivo de los desechos para impulsar la agricultura de manera segura y reducir y capturar las emisiones para obtener energía más ecológica.

    Pero, ¿qué es exactamente un sistema de saneamiento sostenible? El saneamiento sostenible comienza con un inodoro que capture de manera efectiva los desechos humanos en un entorno seguro, accesible y digno. Luego, los desechos se almacenan en un tanque, que puede ser vaciado más tarde por un servicio de recolección o transportado por tuberías.

    La siguiente etapa es el tratamiento y la eliminación segura. La reutilización segura de desechos humanos ayuda a ahorrar agua, reduce y captura las emisiones de gases de efecto invernadero para la producción de energía y puede proporcionar a la agricultura una fuente confiable de agua y nutrientes.

    Fuente: ONU 19 de noviembre de 2020

  • Miércoles, 18 de noviembre de 2020

    La ONU presenta un nuevo mecanismo global
    para financiar programas de saneamiento e higiene

  • La pandemia de COVID-19 ha evidenciado el papel clave del saneamiento y la higiene para detener la propagación de enfermedades. Con un nuevo fondo, la ONU busca canalizar millones de dólares a la creación de infraestructura útil para resolver los grandes problemas de salud pública en los países de renta baja.

    La Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos lanzó un nuevo mecanismo de financiamiento global para apoyar los programas orientados a hacer accesible el saneamiento y la higiene para todos.

    El objetivo del Fondo de Saneamiento e Higiene es la inversión público-privada de 2000 millones de dólares en los próximos cinco años para dar una solución a la crisis de larga data en materia de saneamiento, higiene y salud menstrual.

    El Fondo ayudará a los países con menor capacidad de respuesta a esta crisis y tendrá cuatro metas estratégicas:

  • Ampliar el saneamiento doméstico.

  • Garantizar la salud e higiene menstrual.

  • Proporcionar servicios de saneamiento e higiene en las escuelas y las instalaciones sanitarias.

  • Apoyar las soluciones innovadoras de saneamiento

    Según datos de la ONU, la mitad de la población mundial no tiene acceso a un saneamiento seguro:

  • 620 millones de niños asisten a escuelas sin baños.

  • 1 de cada 3 escuelas no tiene ni siquiera servicios básicos de saneamiento e higiene.

  • 1 de cada 5 establecimientos de salud no tiene ningún servicio de saneamiento.

    Esta falta de servicios cuesta unos 222.000 millones de dólares anuales en productividad perdida, aumento del gasto en salud y producción económica.

    Los Objetivos de Desarrollo Sostenible plantean garantizar el agua limpia y el saneamiento sustentables para todos los habitantes del planeta para 2030; sin embargo, al ritmo actual, esa meta se alcanzaría hasta el próximo siglo.

    La falta de inversión en ese sector durante las últimas décadas ha tenido un profundo impacto negativo en la salud, la educación y los resultados económicos de los países y las comunidades.

    Fuente: ONU 17 de noviembre de 2020

  • Jueves, 5 de noviembre de 2020

    Día Mundial de Concienciación sobre los Sunamis

    Tener un plan nacional y local salva vidas

    En 2020, el Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunami se enfoca en la Meta E de la campaña Sendai Siete, que invita a los países y comunidades a implementar antes de que termine 2020 estrategias nacionales y locales de reducción del riesgo de desastres para salvar más vidas.

    Para 2030, se estima que el 50% de la población mundial vivirá en áreas costeras propensas a inundaciones, tormentas y tsunamis. Tener planes y políticas para reducir el impacto de los tsunamis ayudará a construir una mayor resiliencia y a proteger a las poblaciones vulnerables. ¿Conoce usted algún plan local o nacional que anticipe un tsunami?

    En diciembre de 2015, la Asamblea General de ONU estableció el 5 de noviembre como el Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunami.

    La creación del Día Mundial es una idea original de Japón, que, desafortunadamente, se ha visto expuesto a estos desastres en repetidas ocasiones a lo largo de los años. Este país tiene una gran experiencia en áreas tales como la alerta temprana de sunamis, la acción pública y la reconstrucción posterior a los desastres para conseguir reducir los impactos futuros. La Oficina de la ONU para la Reducción del Riesgo de Desastres se encarga de promer la celebración del Día, en colaboración con las organizaciones relevantes del sistema de las Naciones Unidas.

    En 2014, ONU Hábitat lanzó una iniciativa, Octubre Urbano, para poner de relieve los desafíos urbanos mundiales e involucrar a la comunidad internacional en el desarrollo de la Nueva Agenda Urbana, aprobada en octubre de 2016 en la ciudad de Quito durante la Conferencia de Hábitat III. Esta Nueva Agenda Urbana es la brújula para hacer frente a los desafíos de las ciudades en las próxima dos décadas y ha de ser vista como una extensión del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 11 de la Agenda 2030.

    Los sunamis son fenómenos poco frecuentes, sin embargo, pueden ser extremadamente mortales. En los últimos 100 años, 58 sunamis se han cobrado más de 260.000 vidas, un promedio de 4600 pérdidas humanas por desastre, superando cualquier otro riesgo natural. El mayor número de muertes se concentró en el sunami del Océano Índico de diciembre de 2004. Este sunami causó aproximadamente unas 227.000 muertes en 14 países; los más afectados fueron Indonesia, Sri Lanka, India y Tailandia.

    Apenas tres semanas después, la comunidad internacional se reunió en Kobe, en la región de Hyogo de Japón, donde los gobiernos aprobaron el Marco de Acción de Hyogo para 2005-2015, el primer acuerdo mundial de gran alcance sobre la reducción del riesgo de desastres.

    Crearon, además, el sistema de alerta y mitigación de los efectos de los sunamis en el Océano Índico, que cuenta con decenas de estaciones de vigilancia sismológica y del nivel del mar y difunde las alertas a los centros nacionales de información de sunamis.

    La ONU se encarga de informar a los ciudadanos, organizar simulacros y establecer rutas de evacuación para estar más preparados cuando suceda el próximo tsunami.

    https://youtu.be/jTJyAfzTk68

    Fuente: ONU 05 de noviembre de 2020

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    Martes, 20 de octubre de 2020

    Resultados del undécimo Censo Nacional de Gobierno,
    Seguridad Pública y Sistema Penitenciario Estatales

  • Al cierre de 2019, 2 091 865 servidores públicos se encontraban adscritos a las 1 998 instituciones de las administraciones públicas estatales, y de los 1 950 titulares que se encontraron al frente de estas instituciones, 72.1% eran hombres y 23.3%, mujeres.

    El INEGI presenta los resultados de la undécima edición del Censo Nacional de Gobierno, Seguridad Pública y Sistema Penitenciario Estatales (CNGSPSPE) 2020 que tiene como objetivo generar información estadística y geográfica sobre la gestión y desempeño de las instituciones que integran la Administración Pública de cada entidad federativa, específicamente en las funciones de gobierno, seguridad pública, sistema penitenciario y medio ambiente, así como justicia cívica (únicamente para el caso de la Ciudad de México), con la finalidad de que esta se vincule con el quehacer gubernamental dentro del proceso de diseño, implementación, monitoreo y evaluación de las políticas públicas de alcance nacional en los referidos temas.

    Administración Pública Estatal

    Al cierre de 2019, 2 091 865 servidores públicos se encontraban adscritos a las 1 998 instituciones de las administraciones públicas estatales. De ellos, 56.5% eran mujeres y 43.5%, hombres.

    Respecto del presupuesto que ejercieron los gobiernos estatales, a nivel nacional se reportó un total de 1 528 593 millones de pesos. De ellos, 41.0% se ejerció en Transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas (capítulo 4000).

    Durante 2019, se realizaron 228 497 524 transacciones (solicitudes) por las personas (físicas y morales) ante las instituciones de las administraciones públicas estatales, de las cuales, Consulta médica fue la de mayor frecuencia con 25.2% del total.

    En materia de protección civil, al cierre de 2019, 26 de las 32 entidades federativas contaron con un Plan o Programa de Protección Civil mientras que 24 entidades reportaron tener un Plan de Emergencia o de Contingencia.

    En cuanto al ejercicio de la función de control interno a nivel nacional, durante 2019 se iniciaron 51 833 investigaciones por la presunta responsabilidad de faltas administrativas. De acuerdo con el origen de la investigación, 45.2% provino de una queja y/o denuncia.

    Al cierre de 2019, 17 entidades federativas contaron con un Plan o programa anticorrupción.

    Seguridad Pública

    Durante 2019, a nivel nacional se registraron 12 785 150 llamadas procedentes mediante los sistemas de emergencia 911, 066, 089 u otros.

    En el mismo periodo, se reportaron 1 401 724 intervenciones policiales realizadas. De ellas, 34.1% (477 mil 535) correspondió a presuntas faltas cívicas.

    Respecto de los delitos registrados en las intervenciones policiales realizadas en las entidades federativas durante 2019, la cifra nacional fue de 226 150, de los cuales, 93.0% correspondió a delitos del fuero común y 7.0% a delitos del fuero federal.

    Con relación al aseguramiento de armas, narcóticos y vehículos, durante 2019 se reportaron 272 050 armas aseguradas, de las cuales 74.2% fueron Cartuchos. En cuanto al aseguramiento de narcóticos, Cannabis sativa, indica o mariguana fue el principal tipo de narcótico con 190 039.7 kilogramos. Por su parte, se reportaron 40 037 Vehículos asegurados. De ellos, 53.1% presentó reporte de robo.

    Sistema Penitenciario

    Al cierre de 2019, se reportaron 241 centros penitenciarios. En ellos se contó con una capacidad instalada de 158 994 espacios (camas útiles). Por su parte, el número de centros especializados de tratamiento o internamiento para adolescentes fue de 47, en los cuales se reportaron 6 mil 730 espacios (camas útiles).

    Durante 2019, ingresaron 102 700 personas a los centros penitenciarios y 1 452 más a los centros especializados de tratamiento o internamiento para adolescentes a cargo de las entidades federativas. Del total de esta población, 92.6% eran hombres y 7.4% eran mujeres.

    En el mismo periodo egresaron 92 57 personas de los centros penitenciarios, y 1 304 más de los centros especializados de tratamiento o internamiento. Del total de egresos, 92.7% fueron hombres y 7.3% fueron mujeres.

    Al cierre de 2019, se encontraban privadas de la libertad 155 400 personas en los centros penitenciarios y 1 322 adolescentes internados en los centros especializados de tratamiento o internamiento. Del total de esta población, 94.7% eran hombres y 5.3% eran mujeres.

    Medio Ambiente

    Con relación a la aplicación de programas por parte de las administraciones públicas estatales, durante 2019, Biodiversidad y ecosistemas fue la materia de mayor frecuencia al registrar 139 programas aplicados.

    El CNGSPSPE se realiza desde 2010 y la presente edición cuenta con 111 cuadros estadísticos organizados en 14 apartados conforme a la siguiente estructura temática: 1) Estructura organizacional y ejercicio de la función de gobierno; 2) Trámites y servicios; 3) Protección civil; 4) Catastro; 5) Transparencia; 6) Control interno y anticorrupción; 7) Defensoría pública o defensoría de oficio; 8) Servicios periciales; 9) Administración de archivos y gestión documental; 19) Planeación y gestión territorial; 11) Seguridad pública; 12) Sistema penitenciario; 13) Medio ambiente; y 14) Justicia cívica.

    Fuente: INEGI 20 de octubre de 2020

  • Miércoles, 14 de octubre de 2020

    Buscan Semarnat y PNUD manejo
    adecuado de residuos electrónicos

  • En México se genera más de 1.1 millones de toneladas de residuos electrónicos y eléctricos, de las cuales 6% contienen sustancias altamente tóxicas.

    Anualmente, en México se produce alrededor de 1.1 millones de toneladas de residuos electrónicos y eléctricos y se estima que para 2026 esta cantidad podría crecer en 17%, lo cual alerta a tomar medidas para su manejo ambientalmente adecuado, ya que contienen elementos peligrosos que ponen en riesgo la salud de las personas y dañan el medio ambiente.

    De acuerdo con el Inventario Nacional de Residuos de Aparatos Electrónicos y Eléctricos del Proyecto Residuos COP, el 6% de los residuos electrónicos que se generan cada año (alrededor de 66 mil de toneladas) cuentan con materiales altamente contaminantes, como metales pesados, baterías y plásticos con retardantes de flama, los cuales pueden provocar graves daños a la salud y al medio ambiente.

    Actualmente, con el aumento en la compra de televisiones, computadoras y teléfonos móviles durante la pandemia por COVID-19, debido al teletrabajo y la educación a distancia, se espera un mayor riesgo de exposición a sustancias altamente tóxicas. Según datos de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) se espera suba hasta 75% la ventas de computadoras y laptops durante el Hot Sale 2020.

    Es por ello que la Semarnat y el PNUD trabajan coordinados para cumplir con las disposiciones del Convenio de Estocolmo para reducir la exposición a los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP) en residuos electrónicos, incentivar su manejo ambientalmente adecuado y fortalecer el marco institucional.

    Informaron que Baja California, la Ciudad de México y Jalisco son entidades que cuentan con un volumen de generación anual de 58 mil, 117 mil y 82 mil toneladas de residuos electrónicos, respectivamente, lo que las ubica como las de mayor generación de basura electrónica.

    De tal manera que el proyecto Residuos COP promueve el desarrollo de planes de manejo piloto en dichas entidades, donde se trabajará de la mano de autoridades locales e industriales y otros actores relevantes para el desarrollo de soluciones efectivas, entre otras acciones a desarrollar.

    Como parte de estos esfuerzos, se busca incorporar la participación del Legislativo y de la iniciativa privada para fortalecer el marco jurídico nacional e intercambiar las mejores prácticas de negocio y ambientales, con el propósito de salvaguardar la salud de los mexicanos e impulsar una economía circular y responsable.

    Fuente: SEMARNAT 13 de octubre de 2020

  • Martes, 13 de octubre de 2020

    Las alertas tempranas ante eventos climáticos extremos
    no protegen a un tercio de la población mundial

  • Pese al gran aumento de los fenómenos meteorológicos y climáticos extremos durante el último medio siglo, que afectan de manera desproporcionada a las comunidades vulnerables, una gran cantidad de personas todavía no está debidamente cubierta por los sistemas de alerta temprana, advierte un estudio coordinado por la Organización Meteorológica Mundial. El lanzamiento del informe sobre el estado de los servicios climáticos en 2020 coincide con la celebración del Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres.

    La publicación elaborada por 16 organizaciones internacionales recuerda que, durante los últimos 50 años, los peligros relacionados con el tiempo, el clima y el agua causaron más de 11.000 catástrofes que provocaron 2 millones de víctimas mortales y ocasionaron pérdidas económicas valoradas en 3,6 billones de dólares.

    En 2018, este fenómeno provocó que unos 108 millones de personas de todo el mundo necesitaran ayuda del sistema humanitario internacional tras tormentas, inundaciones, sequías e incendios forestales.

    Además, el estudio estima que en los próximos diez años esa cifra podría aumentar en casi un 50 %, y que el costo asociado podría rondar los 20.000 millones de dólares anuales.

    El informe señala dónde y cómo pueden los gobiernos invertir en sistemas eficaces de alerta temprana que refuercen la resistencia de los países a los múltiples peligros relacionados con el tiempo, el clima y el agua, y se ofrecen ejemplos de éxito.

    Los sistemas de alerta temprana figuran como máxima prioridad en las contribuciones determinadas a nivel nacional, los esfuerzos de cada país para reducir las emisiones nacionales y adaptarse a los efectos del cambio climático, de casi el 90 % de los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo. Sin embargo, muchos de ellos carecen de la capacidad requerida, y la inversión financiera no siempre llega a los ámbitos donde los recursos son más necesarios.

    Desde 1970, los pequeños Estados insulares en desarrollo han sufrido pérdidas valoradas en 153.000 millones de dólares debido a fenómenos climáticos extremos, una cantidad significativa ya que el producto interno bruto medio de esos países es de 13.700 millones de dólares. 

    “Los datos facilitados por 138 Miembros de la Organización Meteorológica Mundial muestran que solo el 40 % cuentan con sistemas de alerta temprana ante múltiples riesgos. Esto significa que, en promedio, una de cada tres personas en todo el mundo todavía no está cubierta por sistemas de alerta temprana. En la actualidad, solo 75 Miembros de la OMM (39 % del total) prestan servicios de predicción que tienen en cuenta estos impactos”, asegura el informe.

    El informe destaca seis recomendaciones estratégicas para mejorar la implementación y la eficacia de los sistemas de alerta temprana en todo el mundo:

  • Invertir para subsanar las deficiencias de capacidad en cuanto a sistemas de alerta temprana, en particular en los países menos adelantados y en los pequeños estados insulares en desarrollo de África.

  • Centrar la inversión en actividades que permitan transformar la información de las alertas tempranas en acciones tempranas.

  • Velar por la financiación sostenible del sistema mundial de observación en el que se sustentan las alertas tempranas.

  • Someter los flujos financieros a seguimiento para comprender mejor el destino de esos recursos con respecto a las necesidades de implementación de los sistemas de alerta temprana y entender las repercusiones que conllevan esas asignaciones.

  • Fomentar la coherencia de las prácticas de supervisión y evaluación para poder determinar mejor la eficacia de los sistemas de alerta temprana.

  • Subsanar las deficiencias en materia de datos, en particular en los PEID.

    Fuente: ONU 13 de octubre de 2020

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  • Martes, 13 de octubre de 2020

    Día Internacional para la Reducción
    del Riesgo de Desastres 13 de octubre

    La reducción del riesgo de desastres tiene que ver con la gobernanza

  • No existen los desastres naturales como tal, se trata de peligros naturales.

    El Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres de este año se trata de gobernanza. La buena gobernanza del riesgo de desastres se puede medir en las vidas salvadas, la reducción del número de personas afectadas por los desastres y la reducción de las pérdidas económicas. La COVID-19 y la emergencia climática nos advierten de la necesidad de implementar una visión a largo plazo, con instituciones que planifiquen, que sean competentes y empoderadas, y que actúen en función de evidencia científica a favor del bien común.

    Esto requiere contar con estrategias nacionales y locales para la reducción del riesgo de desastres a finales de año, como acordaron los Estados Miembros de las Naciones Unidas cuando adoptaron el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres en 2015. Necesitamos estrategias que tengan en cuenta no solo los hechos puntuales, como las inundaciones y las tormentas, sino también las que respondan al riesgo sistémico generado por las enfermedades zoonóticas, las crisis climáticas y la degradación ambiental.

    La Asamblea General de la ONU decidió designar el 13 de octubre como “Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres” (resolución 44/236) con el propósito de concienciar a los gobiernos y a la opinión pública para que tomen medidas encaminadas a minimizar los riesgos. Asimismo, los desastres, muchos de los cuales se han agravado con el cambio climático, generan un impacto negativo en el desarrollo sostenible y en los resultados deseados.

    En 2016, la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR, anteriormente UNISDR) lanzó la nueva campaña “Sendai siete” centrada en los siete objetivos del Marco de Sendai, el primero de los cuales es reducir la mortalidad de desastres. La campaña busca crear un nuevo grado de sensibilización en torno a las acciones que tienen emprender todos los actores implicados, incluidos los gobiernos nacionales y locales, los grupos comunitarios, las organizaciones de la sociedad civil, el sector privado, las organizaciones internacionales y la ONU.

    Como los efectos de los desastres son más devastadores en el ámbito local, los gobiernos municipales y regionales son los que deben trabajar urgentemente en la preparación y respuesta a las catástrofes. El enfoque del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres se centra en proteger la vida de las personas y en las acciones que se deben tomar. Es pertinente tanto para los riesgos a pequeña como a gran escala, y tanto para los ocasionados por el ser humano como los producidos por las amenazas naturales. Abarca, además, los riesgos ambientales, tecnológicos y biológicos afines.

    Fuente: ONU 13 de octubre de 2020

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  • Lunes, 21 de septiembre de 2020

    Fomenta Agricultura innovación tecnológica
    al servicio de los productores de México

  • El INIFAP promueve el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles y servicios web en beneficio del sector productivo nacional.

    La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural impulsa el desarrollo e innovación tecnológica en sus centros de investigación con el fin de acercar el conocimiento aplicado en el campo a los productores de México, sobre todo a los de pequeña y mediana escala.

    Bajo esta dinámica de trabajo, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) trabaja en concentrar y distribuir bases de datos meteorológicas y generar aplicaciones para dispositivos móviles y servicios web en beneficio del sector productivo en México.

    Se trata de un principio de trabajo del Laboratorio Nacional de Modelaje y Sensores Remotos (LNMySR), donde el INIFAP administra los datos quinceminutales de 440 estaciones meteorológicas automáticas distribuidas en el territorio mexicano, que también emiten alertas fitosanitarias sobre la probabilidad de ocurrencia de plagas y enfermedades en una gama de sistemas producto.

    El laboratorio ofrece cursos y talleres presenciales y en línea donde se capacita a técnicos y productores, promueve la firma de convenios de colaboración para el intercambio de bases de datos climáticos, y trabaja de manera coordinada para mejorar la oferta de productos y servicios informáticos y desarrollos tecnológicos que impactan el campo en México.

    La fuerte asociación de los datos registrados en la Red Nacional de Estaciones Agrometeorológicas Automáticas, que administra el INIFAP, como punto toral en el proceso de validación de las salidas del pronóstico numérico.

    La relevancia del pronóstico numérico es fundamental, dado que el clima afecta las actividades agrícolas, y su obtención inicia con la recopilación de una serie de datos en el tiempo.

    En el proceso de generación del pronóstico se utilizan co-variables como el modelo de elevación digital y algunos recursos topográficos, se aplican pruebas de análisis de datos como regresión múltiple, redes neuronales y correlación canónica, con lo cual se asegura la precisión de los mapas de salida.

    El modelado numérico de las variables meteorológicas más asociadas con el seguimiento al dinamismo de los sistemas de producción es a escala nacional, cubre un periodo de cinco días, y se actualiza diariamente.

    Cada hora, el Laboratorio obtiene una radiografía climática del territorio nacional, incluidas las masas oceánicas, la frontera norte y la frontera sur.

    Con la infraestructura instalada en el laboratorio, comentó, se pueden obtener simulaciones de escala local o regional a un kilómetro. A esta resolución espacial los mapas temáticos son ideales para evaluar el dinamismo en el uso del suelo a través de la obtención de: indicadores sobre sequía, uso del agua, proximidad de eventos meteorológicos extremos de viento y lluvia, y la proveeduría de datos del clima a los sistemas para la medición del riesgo.

    En la gama de procesos físicos simulados destacan los ciclos estacionales y diurnos, flujos de calor sensible y latente, capa límite del planeta, gases de efecto invernadero, aerosoles, capa de hielo, dinamismo de la cubierta vegetal del suelo, circulación oceánica y ciclo biogeoquímico del carbono, entre otros.

    Fuente: SAGARPA 19 de septiembre de 2020

  • Miércoles, 10 de abril de 2019

    Chiapas. Residuos Sólidos Urbanos

     

    La información estadística acerca de la basura o residuos sólidos (RSU) urbanos engloba en lo que es producto de los desperdicios domésticos y de los establecimientos comerciales e industriales en los asentamientos urbanos.

    A partir de 2010 con la implementación de los censos de gobierno municipales, el INEGI genera la estadística de residuos sólidos recolectados y corresponde al cálculo de lo que realiza cada ayuntamiento, independientemente de la cantidad de basura que se genera y para lo cual no existe un dato que la señale. 

    La Secretaría del Medio Ambiente y Vivienda del gobierno del estado, en su documento Programa Estatal para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial en el Estado de Chiapas presenta datos de los volúmenes de basura generada en el año 2010 sin especificar la fuente de ellos o el método de cálculo. 

    Considerando lo anterior se presentan las cifras de residuos sólidos recolectados por los municipios y su evolución desde 2010 con el interés de dar claridad a las estadísticas sobre la basura.

    Fuente: CEIEG Abril 2019

     

    Martes, 28 de marzo de 2017

     

     

     

    Los riesgos hidrometeorológicos son responsables del 90 % de las pérdidas totales causadas por los desastres naturales en todo el mundo. Entre 1970 y 2012, eso significó pérdidas económicas por USD 2,4 billones y 2 millones de muertos. Pero una buena inversión para obtener datos exactos y oportunos de los riesgos hidrometeorológicos puede salvar vidas y hacer crecer las economías.

     

    Con pronósticos precisos del estado del tiempo y de las temperaturas

     
    • Las comunidades se pueden preparar para enfrentar las inundaciones y, por tanto, reducir los daños y las lesiones de personas y animales;
    • Las autoridades de salud, en colaboración con los servicios de meteorología, pueden predecir cuándo las temperaturas y las precipitaciones extremas podrían provocar brotes de enfermedades transmitidas por vectores, entre ellas el zika y el paludismo, y usar este conocimiento para impulsar los esfuerzos de mitigación;
    • Los agricultores podrían cambiar sus cultivos para aumentar su productividad, y las previsiones de las inundaciones y sequías podrían ayudarles a proteger sus medios de subsistencia;
    • Los países pueden tener información más precisa para adaptarse a un clima cambiante, y
    • El sector de energía puede anticipar los niveles de máxima demanda y, en consecuencia, ajustar la producción.

     

    Para apoyar sus dos objetivos de poner fin a la pobreza extrema y aumentar la prosperidad compartida de manera sostenible, el Banco Mundial trabaja con los países en todo el mundo, ayudándoles a aumentar su resiliencia frente a los crecientes desafíos económicos, ambientales y sociales que encaramos hoy en día.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 23.Marzo.2017

     

    Jueves, 19 de enero de 2017

     

    Los riesgos con mayor impacto a nivel mundial este 2017 son las armas de destrucción masiva, los eventos relacionados al clima extremo, crisis del agua, desastres naturales y la capacidad para sobrellevar los efectos del cambio climático, sin embargo, en términos de posibilidad de suceder, en primer lugar están los eventos relacionados al clima extremo seguidos de la migración involuntaria a gran escala, los desastres naturales, los ataques terroristas y el robo o fraude de datos.

     

    Así lo dio a conocer el Reporte de Riesgos Globales 2017 que publica anualmente el Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés).

     

    El reporte destaca la interconexión de los diversos problemas que vive el mundo, tales como:

     
    • Inequidad
    • Creciente polarización política y social
    • Economía débil y dificultad para hacer negocios
    • Cambios tecnológicos
    • Disparidad en los ingresos y la riqueza
    • Sistemas globales de cooperación en riesgo

     

     

    Publica: IMCO 12.Enero.2016

     

    Lunes, 9 de enero de 2017

     

    La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indicó hoy que el balance provisional de migrantes y refugiados fallecidos a nivel mundial durante el año 2016 fue de casi 7.500 personas.

     

    La OIM informó que la cifra total de decesos en los últimos tres años es de 18.501 y que durante el año pasado la suma de muertes fue superior a la registrada los dos años anteriores, cuando las defunciones no llegaron a superar las 6.000.

     

    El portavoz en Ginebra de la OIM, Joel Millman, indicó que la travesía del Mediterráneo fue la más letal de todas las rutas usadas por los migrantes.

     

    Esta situación se produjo, sobre todo, entre los refugiados en América Latina, donde se registraron unos 700 fallecimientos, una cantidad superior a los cerca de 500 de los años 2014 y 2015.

     

     

    Fuente: CINU 06.Enero.2017

     

    Miércoles, 23 de noviembre de 2016

     

    El impacto de los desastres naturales graves equivale a una pérdida de USD 520 000 millones en el consumo mundial y empujan a unos 26 millones de personas a la pobreza cada año, según se indica en un nuevo informe del Banco Mundial y el Fondo Mundial para la Reducción de los Desastres y la Recuperación (GFDRR).

     

    “Las conmociones climáticas de gran envergadura ponen en peligro décadas de avances en la lucha contra la pobreza”, dijo Jim Yong Kim, presidente del Grupo Banco Mundial. “Las tormentas, las inundaciones y las sequías tienen graves consecuencias humanas y económicas, y a menudo son los pobres quienes pagan el precio más alto. Generar resiliencia frente a los desastres no es solo un objetivo razonable desde el punto de vista económico, es también un imperativo moral”.

     

    En el informe, titulado Unbreakable: Building the Resilience of the Poor in the Face of Natural Disasters (Irrompible: Generar resiliencia en los pobres frente a los desastres naturales), se advierte que los impactos humanos y económicos de los fenómenos meteorológicos extremos sobre la pobreza son mucho más devastadores de lo que se pensaba.

     

    En los 117 países estudiados, se ha observado que el efecto sobre el bienestar (medido en términos del consumo perdido) es mayor que las pérdidas en activos. En vista de que las pérdidas provocadas por los desastres afectan de manera desproporcionada a los pobres, cuya capacidad para hacer frente a estas situaciones es limitada, en el informe se estima que el impacto sobre el bienestar en estos países equivale a pérdidas en el consumo del orden de los USD 520 000 millones al año. Esta cifra supera todas las demás estimaciones en hasta un 60%.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 14.Noviembre.2016

     

    Martes, 22 de noviembre de 2016

     

     

    Para cualquier latinoamericano no son un grupo de nombres al azar sino la denominación de pila de algunos de los más devastadores huracanes de los últimos 25 años.

     

    Devastadores porque estamos acostumbrados a medir su impacto en número de afectados y pérdidas económicas. Con frecuencia, luego de una inundación, huracán o terremoto, se leen titulares sobre cuánto cuesta el daño a edificios, puentes y hasta potenciales cosechas.

     

    Pero este cálculo está a punto de tornarse mucho más crudo.

     

    Aunque estas cifras son útiles, no detallan la manera en que los desastres afectan al bienestar de las personas. Un dólar en pérdidas no significa lo mismo para una persona rica que para una persona pobre.

     

    Un nuevo estudio del Banco Mundial utiliza una metodología que va más allá del recuento tradicional de las pérdidas de activos (bienes personales, casas, tierras). Esta capta mejor los impactos de los desastres naturales sobre los pobres, que a menudo no tienen ningún activo que contabilizar.

     

    Hasta ahora, el impacto de los desastres naturales estaba estimado solo en un 60% de su costo total. Con esta nueva manera de medir, se pasa de estimar unos 300.000 millones de dólares en pérdidas a 520.000 millones de dólares a nivel mundial. Según el informe, los desastres naturales empujan a 26 millones de personas anualmente a la pobreza.

     

    Protección y sistemas de alerta

    Hay soluciones esperanzadoras para blindar a la región contra los desastres naturales.

     

    En el informe se evalúan, por primera vez, iniciativas implementadas para generar resiliencia como los sistemas de alerta temprana, el acceso a servicios bancarios personales, las pólizas de seguros y los sistemas de protección social (como las transferencias de efectivo y los programas de obras públicas), elementos que pueden ayudar a las personas a responder ante las crisis y a recuperarse.

     

    Por ejemplo, las redes de protección social existentes tienen efectos positivos en la recuperación después de un desastre: cada dólar gastado en protección social después de un desastre representa 4 dólares en beneficios en países como Bolivia, Brasil, Colombia, Honduras y Panamá.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 18.Noviembre.2016

     

    Jueves, 13 de octubre de 2016

     

     

    La Asamblea General de las Naciones Unidas ha designado el 13 de octubre como la fecha para celebrar el Día Internacional para la Reducción de Desastres (DIRD), a fin de promover una cultura mundial para la reducción de desastres, lo cual incluye su prevención y mitigación, al igual que actividades de preparación. Desde que el DIRD inició hace ya 25 años, este día se ha transformado en una actividad mundial de gran importancia para aumentar el grado de sensibilización en torno a este tema, y se ha celebrado de diversas formas para alentar esfuerzos dirigidos a establecer comunidades y naciones más resilientes frente a los desastres.

     

    El tema: Vivir para contarlo

    La campaña de 2016 busca crear un nuevo grado de sensibilización en torno a las acciones a emprender para reducir la mortalidad en todo el mundo. La UNISDR desea que usted aproveche la oportunidad que representa el 13 de octubre para que le diga al mundo lo que está haciendo para aplicar el Marco de Sendai, a fin de reducir la mortalidad y mejorar los resultados de salud relativos a los desastres. ¿Está mejorando la forma en que las personas se están informando más acerca del riesgo? ¿Cómo lo está haciendo? ¿Está siendo más inclusivo(a) en el alcance de las alertas tempranas?

     

    Tendencias de la Mortalidad

    Según el CRED, la tasa de mortalidad promedio que se registró entre 2005 y 2014 en el ámbito mundial fue de 76.424 muertes anuales. En 2015, el CRED registró 22.773 muertes para ese año. La siguiente es una lista de las principales amenazas naturales y la cifra promedio de muertes que generaron en esa década, junto con la cantidad respectiva para 2015 en paréntesis: inundaciones, 5.938 (3.310); tormentas, 17.778 (996); sequías, 2.030 (35); aludes, 1.369 (923); terremotos/tsunamis, 42.381 (9.525); incendios forestales, 73 (66); actividades volcánicas, 46 (0); movimientos de masa, 373 (0). Asimismo, en 2014, los desastres tecnológicos cobraron la vida de 5.884 personas y el promedio anual en la década anterior fue de 7.514 muertes. Estas cifras incluyen las víctimas del hundimiento de ferris (transbordadores). Según la base de datos del CRED, los accidentes de transporte equivalen al 74 por ciento estas muertes.

     

    Las emergencias principales de salud pública que generan una preocupación internacional ocurren con regularidad. Más recientemente, la epidemia de ébola que surgió en los empobrecidos países de Guinea, Liberia y Sierra Leona, situados en África Occidental, cobró la vida de unas 11.000 personas y ocasionó un trauma generalizado, al igual que grandes pérdidas económicas. La rápida propagación del virus de Zika es otro ejemplo de estas emergencias.

     

    Resultados

     
    • Un mayor grado de sensibilización mundial sobre el Marco de Sendai, al presentarlo como un plan para salvar vidas y aumentar la resiliencia frente a los desastres ocasionados tanto por amenazas naturales como por los seres humanos.
    • Una mayor inclusión de representantes de grupos vulnerables en programas nacionales para la reducción del riesgo de desastres.
    • Un diálogo público para promover cambios de conducta y actitudes hacia la gestión del riesgo de desastres.

     

     

     

    Fuente: UNISDR 13.Octubre.2016

     

    Martes, 30 de agosto de 2016

     

     

    Desde que en 1945 se llevó a cabo el primer ensayo nuclear, se han realizado casi 2.000 pruebas de este tipo, sin prestar mucha atención a sus efectos devastadores sobre la vida humana. Menos aún se ha estudiado la precipitación radiactiva derivada de los ensayos atmosféricos.

     

    Tanto la reflexión retrospectiva como la historia nos han mostrado los efectos trágicos y aterradores de los ensayos nucleares, especialmente cuando se producen fallos en las condiciones controladas y más aún teniendo en cuenta que las armas atómicas contemporáneas son cada vez más poderosas y destructivas.

     

    Con el objetivo de captar la atención del mundo sobre la gravedad de este asunto y poner de relieve la necesidad de una acción unificada, el 2 de diciembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 29 de agosto Día Internacional contra los Ensayos Nucleares, mediante la aprobación por unanimidad de la resolución 64/35.

     

    El año 2010 fue la primera conmemoración del Día Internacional contra los Ensayos Nucleares. Cada año, desde entonces, el Día se ha observado mediante la coordinación de diversas actividades en todo el mundo, tales como simposios, conferencias, exposiciones, concursos, publicaciones, enseñanza en instituciones académicas, programas de televisión y radiodifusión y otros medios. También se han celebrado diversos eventos en la Sede de las Naciones Unidas. Para la observación del Día en 2013 se proyectan actividades similares.

     

     

    Fuente: ONU 29.Agosto.2016

     

    Viernes, 26 de agosto de 2016

     

    Agricultores centroamericanos han creado una nueva forma de enfrentar desastres – como la sequía que afecta al corredor seco mesoamericano – mediante un innovador mecanismo de protección y trasferencia del riesgo que actúa como un seguro agrícola para quienes no pueden acceder a los sistemas financieros tradicionales.

     

    Se trata de los fondos mutuos de contingencia, apoyados por la FAO en Honduras y Guatemala, los cuales son creados y gestionados por asociaciones de productores para sostener a sus miembros en casos de emergencia.

     

    Según la FAO, estos fondos permiten financiar actividades para aliviar los problemas de las familias más vulnerables afectadas por una calamidad inesperada, como sequías, huracanes, inundaciones y terremotos.

     

    “Están dirigidos a los hogares que no tienen acceso a sistemas formales de financiamiento, ni seguros que les permitan proteger sus medios de vida”, explicó Anna Ricoy, Oficial de Gestión de Riesgo de la FAO.

     

    Además, pueden financiar una diversidad de actividades, como la compra de insumos para una nueva temporada agrícola cuando se perdió la cosecha, apoyar la seguridad alimentaria de los hogares durante una emergencia, o para llevar a cabo actividades productivas y de comercio cuando la comunidad pierde fuentes de ingreso.

     

    Los fondos mutuos de contingencia otorgan mayor sostenibilidad a los medios de vida de los agricultores familiares, fortaleciendo sus organizaciones. Al tener un carácter solidario, por lo general tienen una tasa de interés menor que la de los créditos regulares.

     

    ¿Cómo se construyen los fondos mutuos de contingencia?

    En Guatemala y Honduras los miembros de las asociaciones y las cajas rurales de ahorro reunieron dinero y capital semilla para crear el 40% del fondo. Otro 40% fue una contribución directa de la FAO. El 20% restante se capitaliza constantemente a través de actividades como la producción de tejidos artesanales y tiendas comunitarias para la venta de víveres, entre otros.

     

    Entre el 2014 y 2015, los fondos comunitarios establecidos con el proyecto FAO en Guatemala y Honduras prestaron 170 mil dólares a sus miembros para actividades generadoras de ingresos e invirtieron 23.000 dólares en proyectos comunitarios.

     

    Además, se reinvirtieron 85.000 dólares para garantizar el funcionamiento y sostenibilidad de los fondos y se prestaron 19 mil dólares para actividades de rehabilitación post emergencia.

     

     

    Fuente: CINU 24.Agosto.2016

     

    Martes, 19 de julio de 2016

     

    Aparte de los grandes cambios sociales y tecnológicos de los que son protagonistas, los latinoamericanos menores de 30 años tienen en común una importante diferencia con los que superan las tres décadas: no han vivido un solo mes de sus vidas con una temperatura menor al promedio de las del siglo XX.

     

    Es decir, viven en un planeta que no ha hecho más que calentarse desde que nacieron. Desde febrero 1985, las temperaturas mensuales han estado siempre por encima del promedio mensual del siglo XX. Y en los últimos años, la brecha entre el promedio y la temperatura actual va rompiendo récords casi mes a mes.

     

    De hecho, mayo de este año fue el más caluroso que se haya registrado, según la Oficina del Océano y la Atmósfera de Estados Unidos (NOAA) y la NASA, y el 13er mes consecutivo con temperaturas récord. Y hay pocas esperanzas de que el promedio para julio rompa esa tendencia.

     

    Para enfrentar las consecuencias de esta alza de temperaturas, el 12 de diciembre de 2015, todos los países latinoamericanos, junto a buena parte de la comunidad internacional, firmaron el acuerdo climático en París en el que acordaron aunar esfuerzos para que el alza de las temperaturas no sea superior a 1,5ºC, en promedio.

     

    Y este año, la ONU apoyó esta decisión con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 13, que busca “tomar acción urgentemente para combatir el cambio climático y sus efectos”.

     

    Unos 14 millones de latinoamericanos viven en zonas de alto riesgo ante el cambio climático

     

    Latinoamérica en la línea de fuego

    Incluso si llegáramos a mantener el calentamiento global debajo del límite, habrá que adaptarse a un nuevo clima, cuyos efectos ya se experimentan a lo largo de la región, con un aumento de 0,87ºC del promedio mundial que se vio en mayo de este año.

     

    Según la Oficina de Naciones Unidas para la coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), desde 2014 la región experimenta sequías a lo largo del Caribe, Centroamérica y en Bolivia, provocadas por la poca lluvia y por el fenómeno de El Niño.

     

    Hoy en día se calcula que más de 3,5 millones de personas en El Salvador, Guatemala y Honduras viven en condiciones de inseguridad alimentaria por la pérdida de sus cosechas.

     

    Mientras en abril de este año, cayó sobre Haití en solo tres semanas el equivalente a la mitad de la precipitación anual, provocando fuertes inundaciones y afectando a más de 9.000 familias. Y más al sur, inundaciones y derrumbes provocados por lluvias torrenciales afectaron a más de 411.000 personas en Argentina, Ecuador, Bolivia, Brasil, Paraguay, Perú, y Uruguay, según la OCHA.

     

    Para los expertos del Banco Mundial, es claro que Latinoamérica será una de las regiones más afectadas por el cambio climático, especialmente si el mundo no logra mantener el calentamiento global debajo de un promedio de 2ºC.

     

    En total, un 2.2% de la población latinoamericana – unos 14 millones de personas – viven en zonas a menos de 5 metros sobre el nivel del mar, fuertemente expuestas al impacto del cambio climático según nuevos datos del informe.

     

     

    Fuente: iAGUA 19.Julio.2016

     

    Viernes, 24 de junio de 2016

     

    El daño ambiental aumenta en todo el planeta, pero aún hay tiempo para revertir el peor impacto si los gobiernos actúan ahora

     

    El cambio ambiental que afecta al mundo está ocurriendo a una velocidad muchísimo más rápida de lo que antes se pensaba, haciendo imperativo que los gobiernos actúen ahora para revertir el daño que se le ha hecho al planeta, afirma el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA, en las evaluaciones regionales sobre el estado del ambiente global.

     

    Bajo el título Perspectivas del Medio Ambiente Mundial (GEO-6): Evaluaciones Regionales, seis informes separados proveen un estudio altamente detallado de los problemas ambientales que afectan cada una de las seis regiones en el mundo: la región Paneuropea, América del Norte, Asia y el Pacífico, Asia Occidental, América Latina y el Caribe, y África.

     

    Publicado previo al inicio de la segunda sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, UNEA-2 el 23 de mayo en Nairobi, Kenia, las evaluaciones regionales encuentran que a nivel global se comparte una serie de amenazas ambientales comunes que están rápidamente intensificándose en muchas partes del mundo.

     

    En casi todas las regiones, el crecimiento de la población, la rápida urbanización, el aumento en el nivel de consumo, la desertificación, la degradación de la tierra y el cambio climático se han combinado para hacer que los países sufran una escasez de agua más severa. Estas preocupantes tendencias también están haciendo cada vez más difícil que el mundo se alimente, advierten los informes, que involucraron 1.203 científicos, cientos de instituciones científicas y más de 160 gobiernos.

     

    Calidad del aire

    Las emisiones del gas de efecto invernadero están creciendo en América Latina como resultado de la urbanización, el crecimiento económico, el consumo energético y los cambios en el uso de la tierra, así como otros factores. Estos cambios generan una degradación en la calidad del aire, tanto interno como externo. La mayoría de las ciudades en la región para las cuales hay datos disponibles tienen concentraciones de materia particulada (MP) sobre las directrices de la Organización Mundial de la Salud, OMS. Monterrey en México, por ejemplo, tiene concentraciones medidas de MP2.5 de 85,9, muy sobre el límite recomendado de la OMS de 20. Sin embargo, la región ha hecho progreso en la reducción de sustancias que afectan a la capa de ozono y la eliminación del plomo en la gasolina.

     

    En América Latina un estimado de 100 millones de personas viven en áreas susceptibles a la contaminación del aire, en su mayoría en áreas densamente pobladas en la ciudad. En 2012, un total de 138.000 muertes en las Américas (renta baja y media) fueron atribuidas a la contaminación del aire en el ambiente y a la contaminación del aire doméstico.

     

    Pérdida de hábitat y degradación de la tierra

    América Latina y el Caribe contiene 12 de los 14 biomas en el mundo y 191 de las 867 ecorregiones únicas del mundo. Estas regiones proveen servicios de ecosistema valiosos – tales como la regulación del agua, el almacenamiento de carbono, alimento y formas de vida. La pérdida y degradación del hábitat continúan siendo uno de los mayores retos en la región. La deforestación en el Amazonas y en otros ecosistemas forestales, menos tierras de pastizales y biomas montañosos frágiles son ejemplos de estos procesos de degradación. A su vez, la degradación del hábitat baja los servicios en el ecosistema, sus funciones y biodiversidad, amenazando el desarrollo y el bienestar humano.

     

     

    Fuente: UNEP Mayo.2016

     

    Viernes, 24 de junio de 2016

     

    En mayo de 2016 se han vuelto a batir récords de temperatura mundial, según los datos recién publicados por la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA), que también señaló que esta primavera (en el hemisferio norte) ha sido la más cálida jamás registrada.

     

    La temperatura ha sido especialmente elevada en el Ártico, lo cual ha adelantado mucho el derretimiento anual del hielo marino en el Ártico y de la cobertura de hielo en Groenlandia. La extensión del manto de nieve fue excepcionalmente reducida en el hemisferio norte.

     

    Las temperaturas sin precedentes de mayo vinieron acompañadas de otros fenómenos extremos, como las muy intensas precipitaciones registradas en algunas zonas de Europa y del sur de Estados Unidos de América y una decoloración grave y generalizada de los corales.

     

    “La situación del clima observada hasta este momento del año nos da muchos motivos de alarma,” declaró David Carlson, Director del Programa Mundial de Investigaciones Climáticas. “Estamos viendo temperaturas excepcionalmente elevadas, tasas de derretimiento de la cobertura de hielo en marzo y mayo que normalmente no se dan hasta julio, episodios de lluvias sin precedentes en esta generación. La intensidad excepcional del fenómeno El Niño es responsable solamente en parte. Lo anormal es ahora la norma.”

     

    El fenómeno El Niño, de gran fuerza pero que ya se ha disipado, contribuyó a las elevadas temperaturas registradas hasta el momento en 2016. No obstante, la causa fundamental del calentamiento global siguen siendo los gases de efecto invernadero que se vierten a la atmósfera de resultas de la actividad humana.

     

    Temperaturas:

    Este ha sido el mayo más caluroso del que se tiene constancia. Las temperaturas superiores a la media fueron especialmente pronunciadas en las latitudes más altas del hemisferio norte, según el Instituto Goddard de Investigaciones Espaciales de la NASA. Fue también la primavera (marzo-abril-mayo) más calurosa de la que se tienen datos. La Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera de Estados Unidos no ha publicado aún sus cifras de temperatura de mayo.

     

     

    Fuente: OMM 17.Junio.2016

     

    Viernes, 10 de junio de 2016

     

     

    El director ejecutivo de ONU Habitat, Joan Clos, presentó hoy en la sede de Nueva York una nueva herramienta científica que mide la tasa de urbanización global, sus características y el efecto potencial de la expansión urbana en la calidad de vida de los habitantes de las ciudades.

     

    “La Muestra Global de Ciudades de la ONU” usa una muestra representativa de 200 ciudades, tanto de países desarrollados como en desarrollo, a las que somete a un seguimiento con el que interpretar diversos aspectos de la vida urbana.

     

    Entre esos factores se encuentran la calidad del aire y del agua, el tiempo empleado en viajar desde el hogar al trabajo, cercanía respecto al lugar de empleo, la accesibilidad a la vivienda y el acceso al espacio público.

     

    Joan Clos señaló el carácter multidisciplinario de la iniciativa que proporciona datos de acceso público a los investigadores para establecer comparaciones científicamente válidas entre las ciudades del mundo.

     

     

    Fuente: ONU 09.Junio.2016

     

    Viernes, 10 de junio de 2016

     

     

    Entre 2003 y 2014, el impacto de los desastres naturales en el sector agrícola de América Latina provocó pérdidas de más de 34.000 millones de dólares, afectando a 67 millones de personas, según datos de la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

     

    Para cambiar esta tendencia, altos representantes de los países de la región debatieron hoy en Asunción sobre cómo incrementar la resiliencia y los medios de vida del campo frente a las crisis y desastres con el objetivo de erradicar el hambre.

     

    En el marco de la Reunión Ministerial para la Implementación del Marco de Sendai en las Américas, que se celebra desde ayer en la capital paraguaya, los altos funcionarios delinearon las bases para una estrategia regional de gestión de riesgos de desastre en el sector agrícola, como parte del Plan de Seguridad Alimentaria de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

     

    El director de Gestión de Riesgos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación de Guatemala, Rudy Vásquez Villatoro, participante en el evento, explicó en entrevista con Radio ONU, algunas de las medidas para reducir los riesgos en ese rubro.

     

     

    Fuente: ONU 09.Junio.2016

     

    Jueves, 9 de junio de 2016

     

    Reducir los riesgos de desastres en los países de América compete a toda la sociedad, aseveró hoy el director de la Oficina de la ONU para la Reducción de Riesgos de Desastres (UNISDR) en Asunción, Paraguay, ante más de 170 ministros y delegados de alto nivel de todos los países del continente.

     

    Robert Glasser participó en la inauguración de la Reunión Ministerial para la Implementación del Marco de Sendai en las Américas, donde recordó que esta región del mundo es particularmente vulnerable a los siniestros.

     

    “Las Américas, como todos bien sabemos, es una de las regiones más expuestas del mundo. El Niño y La Niña son uno de los desafíos que enfrentan. El Niño puede estar terminando, pero millones de personas en toda la región siguen amenazadas por la sequía y las inundaciones como resultado del fenómeno. El reciente terremoto en Ecuador subrayó nuevamente lo vulnerable que es la región a los riesgos de gran magnitud”, dijo Glasser.

     

    Agregó que la pobreza sigue siendo una de las causas de los desastres, aunque reconoció que los países del continente han progresado en la preparación para los desastres y en la mitigación de sus efectos.

     

     

    Fuente: ONU 08.Junio.2016

     

    Martes, 7 de junio de 2016

     

     

    ¿Por qué la cubierta de hielo marino que rodea la Antártida ha ido aumentando ligeramente, en agudo contraste con la drástica pérdida de hielo marino que ocurre en el Océano Ártico?

     

    Un nuevo estudio dirigido por la NASA ha determinado que la geología de la Antártida y el Océano Austral son los últimos responsables.

     

    Un equipo de la NASA y la NOAA analizó datos de radar de satélite, la temperatura superficial del mar, la forma de la tierra y la batimetría (profundidad del océano), para el estudio de los procesos físicos y las propiedades que afectan el hielo marino antártico.

     

    Encontraron que dos factores geológicos persistentes – La topografía de la Antártida y la profundidad del océano que lo rodea – están influyendo en los vientos y las corrientes oceánicas, respectivamente, para impulsar la formación y evolución de la capa de hielo marino de la Antártida y ayudar a sostener la misma.

     

    “Nuestro estudio proporciona una fuerte evidencia de que el comportamiento del hielo marino antártico es totalmente coherente con las características geofísicas que se encuentran en la región del polo sur, que difieren marcadamente de las presentes en el Ártico”, dijo Son Nghiem, primer autor del estudio y científico del Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA.

     

    La cubierta de hielo marino de la Antártida está dominada por hielo de primer año o de temporada. Cada año, el hielo del mar alcanza su máxima extensión en todo el continente helado en septiembre y se retira a alrededor del 17 por ciento de esa medida en febrero. Desde finales de 1970, su alcance ha sido relativamente estable, aumentando ligeramente; sin embargo, se observan diferencias regionales.

     

    Sus análisis revelaron que a medida que se forma el hielo del mar y se acumula a principios de la temporada de crecimiento del hielo del mar, es empujado mar adentro y hacia el norte por los vientos, formando un escudo protector del hielo más grueso más antiguo que circula por el continente. Los vientos persistentes, que soplan hacia el exterior del continente y tienen la forma de la topografía de la Antártida, apilan el hielo contra el enorme escudo de hielo, aumentando su espesor. Esta banda de hielo, que varía en anchura desde aproximadamente 100 a 1.000 kilómetros, encapsula y protege el hielo más joven y delgado del efecto de los vientos y las olas.

     

    El equipo también usó los datos de radar QuikScat para clasificar los diferentes tipos de hielo marino de la Antártida. El hielo más viejo y grueso del mar devuelve una señal de radar más fuerte que el hielo más delgado. Ellos encontraron que el hielo marino dentro del escudo protector era mayor y más áspero (debido a una mayor exposición al viento y las olas), y más grueso (debido a un mayor crecimiento del hielo y acumulación de nieve).

     

    A medida que la capa de hielo marino se expande y el hielo se aleja del continente, las zonas de agua abierta se forman detrás de él en la superficie del mar, creando de hecho “fábricas de hielo” que conducen a un rápido crecimiento del hielo marino.

     

     

    Fuente: iAGUA 31.Mayo.2016

     

    Jueves, 26 de mayo de 2016

    Los primeros esfuerzos de los Gobiernos por establecer un precio para la contaminación causada por carbono señalan el peso creciente de la mitigación de las emisiones como fuente de ingresos. En 2015, los Gobiernos recaudaron unos USD 26 000 millones por el cobro de las emisiones de carbono, lo que representa un aumento del 60 % respecto del año anterior, según el informe Carbon Pricing Watch 2016  (Panorama sobre la fijación del precio del carbono 2016), publicado por el Banco Mundial.

     

    Desde 2015 se han puesto en marcha o están en preparación cuatro nuevas iniciativas con las que se busca fijar un precio para el carbono en Corea, Portugal, Australia y la provincia de Columbia Británica en Canadá.

     

    Hasta la fecha, 40 países y más de 20 ciudades, estados y regiones que representan una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero han establecido un precio para el carbono. Este grupo incluye 7 de las 10 economías más grandes del mundo. En conjunto, los mecanismos de fijación del precio del carbono abarcan unas 7 gigatoneladas de CO2 equivalente (el 13 % de las emisiones mundiales), un volumen comparable al que se evitaría si se cerraran durante un año más de 1800 plantas de electricidad alimentadas a carbón. El valor total de los mecanismos de precios existentes alcanza unos USD 50 000 millones.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 25.Mayo.2016

     

    Martes, 24 de mayo de 2016

     

    El Niño es un fenómeno cíclico provocado por el calentamiento de la superficie del océano Pacífico. Este fenómeno puede desencadenar cambios en los sistemas meteorológicos y, en consecuencia, en las temporadas de cultivo en todo el mundo.

     

    Pero ¿cuáles son los efectos que está causando en los diferentes países del mundo?. A esta pregunta responde un mapa elaborado con  información obtenida a través de la red estadounidense Famine Early Warning Systems Network (FEWS-NET), la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) de las Naciones Unidas e investigaciones e informes de país de Oxfam.

     

    América Central y del Sur

     América Central se enfrenta a una de las sequías más graves de su historia que ya dura tres años y está siendo exacerbada por los efectos del fenómeno El Niño de 2015. La inseguridad alimentaria de la población campesina y los pequeños agricultores continúa empeorando en diversas áreas de América Central, el Caribe y las zonas montañosas de América del Sur.

     

    Las cosechas son escasas y de baja calidad. Las comunidades del denominado “corredor seco” de Guatemala, Nicaragua, Honduras y El Salvador son las más perjudicadas: cerca de 3,5 millones de personas tienen graves dificultades para acceder a alimentos básicos. Los hogares más pobres son los más afectados. Muchas personas padecerán una grave desnutrición al menos hasta la próxima cosecha de agosto.

     

    Por ejemplo en Bolivia, El Niño ha traído cambios extremos de temperatura, con reportes de granizadas, heladas, sequías, inundaciones y otros eventos que han afectado a más de 59.000 familias en todo el país desde octubre de 2015. A raíz de este clima inusual, más de 30.000 hectáreas de cultivos han sido afectadas en las zonas del altiplano y los valles, perjudicando sobre todo a los pequeños productores. Los departamentos más afectados en el país son Chuquisaca, Cochabamba, Potosí, Beni, Pando y Oruro.

     

    En Colombia, El Niño ha agravado la sequía que afecta a al menos 800.000 personas en el país, entre ellas los más de 200 niños y niñas que han muerto durante los últimos años en la región de Guajira. Más al sur, el nivel del agua de los dos principales ríos del país, el Magdalena y el Cauca, se ha reducido drásticamente poniendo en riesgo los medios de vida de muchos pescadores y agricultores que dependen del río para subsistir e irrigar sus tierras.

     

     

    Fuente: iAGUA 23.Mayo.2016

     

    Martes, 17 de mayo de 2016

     

    El episodio de El Niño de 2015/2016, que era de gran intensidad, se está debilitando rápidamente. No obstante, todavía hay posibilidades de que influya en las condiciones climáticas de algunas regiones hasta mediados de año. Según los modelos de predicción climática se volverá a unas condiciones neutras de El Niño/Oscilación del Sur (ENOS) en mayo de 2016, habiendo aumentado las posibilidades de que se forme un episodio de La Niña en el tercer trimestre del año. Es altamente improbable que se reactive el episodio de El Niño en 2016. Los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales supervisarán de cerca la evolución del fenómeno ENOS en los próximos meses.

     

    Entre octubre de 2015 y febrero de 2016 las temperaturas oceánicas en las partes central y oriental del Pacífico tropical superaron la media en más de 2 grados Celsius, pero actualmente están volviendo a unas condiciones neutras. Así, a principios de mayo, se apreciaba ya un descenso de las temperaturas de esas zonas, que se situaban entre 0,5 y 1,0 grados Celsius por encima de la media.

     

    Los indicadores atmosféricos propios de un episodio muy fuerte de El Niño observados a comienzos de año se fueron debilitando significativamente hacia unas condiciones neutras de ENOS a principios de mayo. Entre esos indicadores característicos cabe citar una presión atmosférica más baja de lo normal en las partes central y oriental del Pacífico tropical, el debilitamiento y, en ocasiones, la inversión de los vientos alisios de las capas bajas del Pacífico, una nubosidad superior a la media y un aumento de la precipitación cerca de la línea internacional de cambio de fecha y al este de la misma. Por lo general, los episodios de El Niño persisten hasta bien entrado el primer trimestre del año siguiente a su formación – y a veces hasta el segundo trimestre –  antes de que vuelvan a darse unas condiciones neutras. Debido a su fuerte intensidad, este episodio de El Niño ha perdurado hasta principios de mayo, aunque con una intensidad débil, pero probablemente se vuelva a unas condiciones neutras antes de finales de mayo.

     

    Es importante tener en cuenta que El Niño y La Niña no son los únicos factores que condicionan las características climáticas a escala mundial. Además, no existe necesariamente una correspondencia directa entre la intensidad de un episodio de El Niño y sus efectos climáticos a escala regional. Por lo que se refiere a la escala regional, las proyecciones estacionales deberán tener en cuenta los efectos relativos tanto de El Niño y La Niña como de otros condicionantes climáticos pertinentes a escala local. Por ejemplo, se sabe que la temperatura de la superficie del océano Índico, del sureste del Pacífico y del Atlántico tropical influyen en el clima de las zonas terrestres adyacentes. A escala regional y local puede encontrarse información aplicable en las predicciones climáticas estacionales regionales o nacionales, tales como las elaboradas por los Centros Regionales sobre el Clima (CRC) de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), los Foros regionales sobre la evolución probable del clima (FREPC) y los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales (SMHN).

     

     

    Fuente: OMM 13.Mayo.2016

     

    Martes, 17 de mayo de 2016

     

    En Ecuador, el mes pasado, un terremoto de magnitud 7,8 provocó más de 600 muertos y casi 30 000 heridos. Los daños económicos se estimaron en más de USD 3000 millones (dólares estadounidenses). Desafortunadamente, eventos como estos se están volviendo muy comunes. Los impactos de los desastres naturales van en aumento, amenazando cada vez más las economías y las vidas de millones de personas en todo el mundo.

     

    De hecho, las pérdidas mundiales debido a los desastres casi se han cuadruplicado en las últimas décadas, subiendo de un promedio de USD 50 000 millones al año en la década de 1980 a cerca de USD 200 000 millones anuales en el último decenio. Las personas pobres son las más afectadas por estas situaciones: en los últimos 20 años, en los países de ingreso bajo se produjeron un poco más de una cuarta parte de las inundaciones, pero en ellos se registró casi con el 90 % de las víctimas relacionadas con dichos eventos meteorológicos.

     

    Tendencias como el crecimiento de la población y el aumento de la urbanización provocan pérdidas en las regiones vulnerables. Hasta 1,4 millones de personas se trasladan a las ciudades semanalmente y gran parte de este crecimiento —un 90 % hasta 2050— ocurrirá en África y Asia. Al mismo tiempo, el cambio climático amenaza con empujar a la pobreza a más de 100 millones de personas antes de fines de 2030. Ejemplos como estos ponen de manifiesto que el riesgo de desastres no es estático, sino que evoluciona de manera muy rápida.

     

    Una mayor cantidad de Gobiernos, comunidades y organizaciones internacionales están aprendiendo que las inversiones inteligentes en preparación y capacidad de adaptación pueden evitar que los peligros naturales se conviertan en catástrofes para la humanidad. Estas inversiones también pueden ofrecer otros beneficios, como estimular la creación de empleos y el crecimiento económico, aumentar las oportunidades educativas, mejorar la igualdad de género y la protección del medio ambiente, y además pueden ayudar a lograr las exigentes metas de desarrollo cuyo plazo vence en 2030.

     

    La información precisa y confiable sobre los riesgos de desastres es el eje de inversiones eficaces. Según el Fondo Mundial para la Reducción de los Desastres y la Recuperación (GFDRR), (i) una alianza de 34 países y nueve organizaciones internacionales administrada por el Banco Mundial, convencer a los Gobiernos de que inviertan antes de que se produzca un desastre requiere un proceso de identificación de riesgos rápido, riguroso y sistemático. A medida que la tecnología permite que la información sobre los riesgos de desastres sea más accesible que nunca, las personas y los Gobiernos de todo el mundo mejoran su capacidad (i) de identificar los riesgos.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 16.Mayo.2016

     

    Viernes, 13 de mayo de 2016

     

    Abril, mayo y junio, meses de mayor frecuencia e intensidad de incendios, asociados con el fenómeno de El Niño

     

    En México, al igual que en otros países, los incendios forestales de gran relevancia propician cambios en la vegetación, disminuyen la calidad de los servicios ambientales y contribuyen al calentamiento global. En el territorio nacional, entre 2000 y 2014 los estados más afectados por tales fenómenos fueron Guerrero, por el número total de hectáreas dañadas, y Coahuila, por superficie alterada a causa de incendios de alta relevancia –de más de tres mil hectáreas–.

     

    Estos son algunos de los resultados del estudio “Incendios forestales de gran relevancia en México: algoritmos y sensor MODIS para su detección y monitoreo”, que permitió la obtención del primer mapa en ese ámbito que se crea en nuestro país, realizado por Lilia de Lourdes Manzo Delgado, del Instituto de Geografía (IGg) de la UNAM.

     

    La experta señaló que en nuestro territorio la temporada de incendios forestales inicia, por lo general, en enero y concluye en junio, y son los meses de abril, mayo y junio los de mayor frecuencia e intensidad. Además, se asocian a la ocurrencia del fenómeno de El Niño, con altas temperaturas y sequías severas, como lo que se vive este año.

     

    En el periodo mencionado, las estadísticas oficiales registraron más de 120 mil incendios que afectaron alrededor de cuatro millones de hectáreas. El año 2011 tuvo 12 mil 113 incendios y la mayor superficie quemada, con 956 mil 405 hectáreas, seguido de 2013 y 2014. A partir de 2006, los datos han mostrado que 66 por ciento de los incendios dañaron superficies de menos de cinco hectáreas y que 83 por ciento fueron de corta duración (menos de 24 horas).

     

    No obstante, hacía falta información detallada. Así, con base en datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la experta hizo una agrupación con los incendios mayores a 50 hectáreas, separándolos en cuatro clases: entre 50 y 100 hectáreas; entre 100 y mil; mil y tres mil, o mayores de tres mil.

     

    El objetivo fue representar en el mapa los de mayor envergadura, como aquellos que hicieron historia: el de Quintana Roo, en 1989, con 135 mil hectáreas quemadas; Chimalapa, en 1998, con 210 mil; y el de Coahuila, de 2011, con 314 mil hectáreas.

     

    El método empleado por la científica fue el de percepción remota mediante sensores MODIS, de la Universidad de Maryland, cuya resolución de un pixel corresponde a 500 metros; la información fue procesada y validada con imágenes captadas por la NASA. Así se obtuvo una buena confiabilidad para la información.

     

    De ese modo se consiguieron resultados interesantes: aunque los incendios de gran relevancia sólo representan el 0.6 por ciento del total, provocan el 26 por ciento de las afectaciones en las superficies quemadas. En contraste, los de muy baja relevancia (cuyo impacto es menor a 50 hectáreas) representan el 69 por ciento del total de registros, aunque su impacto en el daño en la superficie nacional quemada es menor al siete por ciento.

     

    Detectó que los estados del norte son los que tienen mayor incidencia de áreas quemadas superiores a tres mil hectáreas (Coahuila, Chihuahua, Sonora e, incluso, Baja California y Zacatecas). Hacia el centro y el sur estos fenómenos no son tan recurrentes.

     

    La ubicación de los grandes incendios, explicó la especialista, se debe al tipo de ecosistemas: hacia el norte están los bosques de pino y matorrales, donde el fuego se propaga con más facilidad por las condiciones de viento, falta de humedad y temperatura.

     

    En cambio, hacia el sur se localizan los hábitats tropicales y las selvas, donde hay mucha humedad. A pesar de ello, en 1998 en sitios como la Reserva de la Biósfera de Montes Azules, en Chiapas, se presentó un grave incendio del cual, a casi 20 años, la universitaria pretende evaluar la recuperación.

     

     

    Fuente: UNAM 11.Mayo.2016

     

    Martes, 10 de mayo de 2016

     

    El planeta envía un mensaje contundente con respecto al Acuerdo de París Una serie prolongada de temperaturas y fenómenos meteorológicos extremos sin precedentes en todo el mundo, la rápida fusión del hielo del Ártico y la decoloración generalizada de los arrecifes de coral de los océanos ponen de manifiesto la necesidad urgente de firmar y aplicar el Acuerdo de París sobre cambio climático, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

     

    El Secretario General de la OMM, Petteri Taalas, afirmó que 2016 ya ha logrado eclipsar a 2015, año en el que se registraron numerosos valores máximos.

     

    “La magnitud de los cambios ha asombrado hasta a los climatólogos más experimentados. Estamos siendo testigos del cambio del estado del planeta”, afirmó el señor Taalas.

     

    Es importante prestar atención a la adaptación, puesto que se prevé que la tendencia negativa del creciente número de desastres relacionados con el tiempo se prolongue hasta la segunda mitad de este siglo. Se necesitan más inversiones en servicios de alerta temprana de desastres y servicios climáticos modernos, especialmente en los países en desarrollo.

     

    La OMM está trabajando en un Sistema mundial integrado de información sobre gases de efecto invernadero, que permitirá a los gobiernos detectar y seguir de cerca fuentes específicas de emisiones nacionales con objeto de diseñar medidas más específicas para limitarlas.

     

    La Organización también está dando máxima prioridad a la elaboración de productos de información climática fiables y accesibles que puedan servir al sector de la energía para perfeccionar la gestión de las fuentes renovables, como la energía solar y eólica, y aumentar la eficiencia energética.

     

    Efectos del cambio climático

    Un intenso episodio de El Niño ha contribuido a las elevadas temperaturas y los fenómenos extremos ocurridos en los últimos meses. No obstante, el principal causante es el cambio climático de larga data inducido por el ser humano. Cada una de las pasadas décadas ha sido considerablemente más cálida que la anterior. El período 2011–2015 y el año 2015 fueron los más cálidos de la historia.

     

    En los primeros tres meses de 2016 también se han registrado temperaturas sin precedentes, que se desviaron como nunca antes de los valores de referencia, según los datos preliminares de la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) y el Servicio Meteorológico de Japón.

     

     

    Fuente: OMM 21.Abril.2016

     

    Lunes, 9 de mayo de 2016

     

     

    Según el Banco Mundial, la escasez de agua provocada por el clima podría afectar en hasta un 6 % la tasa de crecimiento económico de algunas regiones

     

    La escasez de agua, exacerbada por el cambio climático, podría conllevar la reducción de hasta el 6 % del producto interno bruto (PIB) en algunas regiones, provocar migraciones y generar conflictos, según un nuevo informe del Banco Mundial.

     

    En High and Dry: Climate Change, Water and the Economy (Situación crítica: El cambio climático, el agua y la economía), se afirma que, debido a los efectos combinados del crecimiento de las poblaciones, el aumento de los ingresos y la expansión de las ciudades, la demanda de agua registrará un crecimiento exponencial, en un contexto en el que el suministro se torna más errático e incierto.

     

    A menos que se adopten medidas en el corto plazo —se señala en el informe—, el agua comenzará a escasear en regiones donde hoy es abundante, como África central y Asia oriental, y la escasez se intensificará considerablemente en regiones donde el agua ya es un recurso escaso, como Oriente Medio y el Sahel en África. Para 2050, las tasas de crecimiento de esas regiones podrían registrar una disminución de hasta el 6 %, debido a los efectos de la escasez de agua en la agricultura, la salud y los ingresos.

     

    En el informe también se advierte que la menor disponibilidad de agua dulce y la competencia que generan otros usos —como la energía y la agricultura— podrían llevar a que para 2050 la disponibilidad del agua en las ciudades se reduzca en casi dos tercios respecto de los niveles de 2015.

     

    En el informe se señala que los impactos negativos del cambio climático en el agua podrían neutralizarse con decisiones políticas más acertadas y que en algunas regiones las tasas de crecimiento podrían aumentar hasta un 6 % si se mejorara la gestión de los recursos hídricos.

     

    “Hay una luz de esperanza”, manifestó Richard Damania, autor del informe y economista principal del Banco Mundial. “Cuando los Gobiernos responden a la escasez de agua promoviendo la eficiencia y asignando incluso el 25 % del agua a usos más productivos, las pérdidas disminuyen drásticamente y, en el caso de algunas regiones, incluso desaparecen. La mejora en la gestión de los recursos hídricos genera altos dividendos económicos”.

     

    En las regiones extremadamente secas del mundo, deben adoptarse políticas de mayor alcance para evitar el uso ineficiente del agua. Según el informe, para lidiar con los factores de estrés climático se requieren políticas y reformas más contundentes.

     

     

    Fuente: BANCO MUNDIAL 03.Mayo.2016

     

    Martes, 1 de marzo de 2016

     

    En las últimas dos décadas, los desastres naturales han tenido un impacto desproporcionado sobre las mujeres, en gran parte debido a la discriminación a la que se ven expuestas, denunció este lunes el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, en un debate general en Ginebra como parte de su 63ª sesión, que se prolongará hasta el viernes.

     

    La consulta de hoy fue el primer paso en el proceso para elaborar una recomendación general del Comité sobre las dimensiones de género de la reducción del riesgo de desastres y el cambio climático.

     

    Diferentes organismos de la ONU que participaron en el evento, incluyendo la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, destacaron la importancia de los programas de empoderamiento de la mujer e igualdad de género para encarar este problema.

     

    En los últimos 10 años, el riesgo de desastres se ha convertido en una amenaza cada vez mayor para la humanidad, en parte debido al perfil demográfico de muchos países y al envejecimiento de la población, el fenómeno de la urbanización, y la destrucción de los ecosistemas.

     

     

    Fuente: ONU 29.Febrero.2016

     

    Martes, 1 de marzo de 2016

     

     

    El ozono (O3) es un gas incoloro de olor penetrante, altamente oxidante e inestable en altas concentraciones. Puede ser “bueno” o malo para la salud y el medio ambiente dependiendo de en donde se encuentre en la atmósfera.

     

    Este gas se produce naturalmente en la estratósfera. Se considera “bueno” porque protege a la tierra de los rayos ultravioleta.  Esta capa de ozono se destruye gradualmente por compuestos producidos por el hombre conocidos como sustancias que destruyen el ozono, los hidroclorofluorocarbonos (HCFC).

     

    A nivel de superficie (tropósfera) se considera un contaminante porque en ciertos niveles representa un riesgo para la salud humana, la vegetación y los animales.

     

    La temporada de ozono se caracteriza por las altas concentraciones de este contaminante durante largos periodos. Las condiciones que lo favorecen son el aumento de la duración del día, escasa humedad e intensa radiación.

     

    Daños

    La exposición al ozono genera daños en la salud humana, la vegetación y ecosistemas incluyendo los bosques, parques y áreas naturales protegidas.

     

    Acciones

    En el 2013 se creó la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) como una plataforma de gobernanza ambiental regional entre seis entidades para impulsar políticas, programas y acciones de sustentabilidad y economía verde para la región del Centro de México.

     

     

    Fuente: SEMARNAT 25.Febrero.2016

     

    Jueves, 25 de febrero de 2016

     

     

    A finales de este siglo, concretamente, en el año 2100, el nivel del mar del planeta podría aumentar entre los 60 y los 130 centímetros si las emisiones de gases de efecto invernadero son altas, con una concentración de dióxido de carbono (CO2) de 936 partes por millón (ppm). Es una de las conclusiones de un estudio internacional publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), en el que participa la Universidad Complutense de Madrid.

     

    “Nuestros resultados son bastante coherentes con las últimas estimaciones del IPCC –el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático–”, explica Alexander Robinson, investigador del departamento de Astrofísica y Ciencias de la Atmósfera de la UCM y del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto del Clima (Alemania), y coautor del estudio.

     

    Para llegar a estas conclusiones, los científicos dibujaron tres escenarios, establecidos en el quinto informe del IPCC, con emisiones bajas, medias y altas. Así, el mejor de los panoramas implica una concentración de CO2 de 421 ppm; el escenario medio, de 538 ppm y el peor escenario, de 936 ppm.

     

    El modelo tiene en cuenta diferentes factores como responsables del aumento del nivel del mar: la capa de hielo antártica, la de Groenlandia, los glaciares de montaña y la expansión térmica del océano a medida que este se calienta.

     

    Un incremento inevitable

    Aunque hoy por hoy resulta inevitable que aumente el nivel del mar, los científicos piden a los gobiernos que hagan caso a lo acordado en París. “Si el mundo quiere evitar grandes pérdidas y daños tiene que seguir rápidamente el camino trazado en la Cumbre del Clima de París de hace unas semanas”, alerta Anders Levermann, investigador del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto del Clima y otro de los coautores del trabajo.

     

    Una de las principales ventajas de este nuevo modelo es su rapidez, que lo hace fácilmente reproducible y permite numerosas simulaciones para calcular cuánto subirá el nivel del mar en el futuro.

     

     

    Fuente: iAGUA 23.Febrero.2016

     

    Jueves, 18 de febrero de 2016

     

     

    El año más caluroso jamás registrado, 2015, ha confirmado que los desastres relacionados con el clima y la meteorología actualmente dominan las tendencias de desastres vinculados con amenazas naturales, de acuerdo con un nuevo análisis presentado hoy.

     

    Los cinco países más afectados por desastres en 2015 fueron China (26), los Estados Unidos de América (22), la India (19), Filipinas (15) e Indonesia (11).

     

    El jefe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres, Robert Glasser, declaró: “Hemos superado el año más caluroso jamás registrado.  98,6 millones de personas se han visto afectadas por desastres el año pasado y el clima, a menudo ayudado por un fuerte fenómeno de El Niño, fue uno de los factores en el 92% de esos casos. El impacto más evidente fue el de las 32 sequías importantes registradas, que fue más del doble de la media anual de diez años. Estas afectaron a 50,5 millones de personas y muchas han continuado este año, en especial en África.

     

    Datos y cifras de los desastres en 2015 frente a las medias de 2005-2014

    El año pasado se registraron 32 sequías importantes en comparación con una media anual de 15 en el decenio anterior. Las sequías afectaron a 50,5 millones de personas, muy por encima de la media de diez años de 35,4 millones.

     

    Las inundaciones en la India el año pasado afectaron a 16,4 millones de personas. Tradicionalmente, las inundaciones son lo que ha afectado a más gente en cualquier año, pero el año pasado pasaron a la segunda posición al producirse 152 inundaciones que afectaron a 27,5 millones de personas y se cobraron 3310 vidas. Esto se compara con la media de diez años de 5938 muertes y 85 millones de personas afectadas.

     

    La subida del nivel del mar y las temperaturas de la superficie del mar fueron factores en una temporada de ciclones muy activa en Asia y el Pacífico, que vieron 37 ciclones y tifones. En total, se registraron 90 tormentas que tuvieron como resultado 996 muertes y que afectaron a 10,6 millones de personas. Esto se compara con una media de diez años de 17 778 muertes y 34,9 millones de personas afectadas.

     

    2015 fue el año más caluroso jamás registrado y esto contribuyó a una pérdida importante de vidas producida por olas de calor, incluyendo un total combinado de 7346 muertes: en Francia (3275), la India (2248) y el Pakistán (1229). En total, se registraron 7346 muertes y 1,2 millones de personas se vieron afectadas por temperaturas extremas en 2015. Esto se compara con la media de diez años de 7232 muertes y 8,7 millones de personas afectadas.

     

    Otras estadísticas de 2015: los terremotos y tsunamis mataron a 9525 personas (incluyendo Nepal) y afectaron a 7,2 millones de personas; los desprendimientos de tierras provocados por fuertes lluvias mataron a 1369 personas y afectaron a 50332, los incendios forestales se cobraron 66 vidas y afectaron a casi 495 000 personas.

     

     

    Fuente: UNISDR 11.Febrero.2016